«Yo creo que las únicas grietas están en el Congreso, en los socios que apoyan al Gobierno y dentro del propio Gobierno. Nunca he visto un Gobierno más agrietado. Del PP yo no me preocuparía, es un partido de Estado y no tiene grietas, lo que tiene son responsabilidades territoriales». Así ha encajado Alberto Núñez Feijóo que Carlos Mazón, el presidente de la Comunidad Valenciana, dijera este martes que está dispuesto a hablar de financiación autonómica y de quita de deuda con Pedro Sánchez cuando este le convoque en la Moncloa. El jefe del Ejecutivo anunció la semana pasada una ronda de reuniones cara a cara con todos los presidentes autonómicos.
Feijóo ha apelado a las «responsabilidades territoriales» de sus dirigentes para no entrar en el fondo de la cuestión cuando los periodistas le han preguntado por las palabras de Mazón. El dirigente conservador ha preferido desviar la atención a la división del Gobierno que se ha visto estos últimos días ante la delicada situación de Venezuela y las dos derrotas parlamentarias que Sánchez va a cosechar esta semana: el PP ha logrado apoyos para que tenga que acudir a hablar de inmigración y para que el Congreso, de manera simbólica, reconozca a Edmundo González como presidente electo del país latinoamericano.