Teresa Perales ha recibido una calurosa bienvenida en Zaragoza por parte de la alcaldesa, Natalia Chueca, con un acto que ha celebrado su récord de 28 medallas y el gran ejemplo que es para todos y todas las zaragozanas. «Yo creo que lo que has conseguido es inigualable, por eso queremos que hoy sientas el calor de tu gente y de tu ciudad. Porque Zaragoza es heroica y Teresa Perales también lo es y no hay forma de llenar esa heroicidad que tú representas«, dice la alcaldesa.
Su hijo ha decidido hablar para mostrar quién es Teresa más allá de la piscina. «Ustedes conocen a Teresa Perales, pero yo conozco a mi madre. Y si ustedes piensan que su madre es la mejor, pues imagínense lo que pienso yo de la mía», asevera. Con mucha claridad ha explicado el orgullo que siente. «Has vuelto a aprender a hacer cosas por segunda, o incluso tercera vez, que uno hace a diario. Lo que más increíble me parece de ti es que siempre encuentras una manera de aceptarte, de seguir adelante sin seguir de sonreír. Hoy puedo decirte con el mayor orgullo que: ¡Mamá eres una campeona!».
La gran leyenda zaragozana sabía que el camino para hacerse con una medalla no iba a ser nada sencillo, pero cada día se supera a sí misma. «En esta ocasión el camino era más difícil todavía, ha sido un camino lleno de muchas piedras y muchos baches, que me hizo pensar que era imposible ganar. Yo presumo mucho de ser maña, pero porque creo que tenemos ese tesón que nos hace llegar hasta donde ni creíamos posible», confirma. Además, añade que «el tener esta medalla no es solo especial por el récord, sino, lo es porque en la Torre Eiffel mi marido me pidió matrimonio y era tan perfecto el conseguir una presea que tuviese un poco de la torre que tenía que traerla conmigo».