A Ursula von der Leyen le está costando más de lo previsto encajar todas las piezas del puzzle de su colegio de comisarios. La presidenta, reelegida en julio para un segundo mandato al frente del Ejecutivo comunitario de 2024 a 2029, estaba convocada este miércoles en la Eurocámara para desvelar el reparto de carteras entre los candidatos enviados a Bruselas por los Estados miembros. El encuentro ha sido anulado: la alemana pide más tiempo (al menos una semana extra) para resolver el sudoku.
El argumento que ha usado Von der Leyen ante el Parlamento Europeo es que todavía le falta una de las piezas. Fruto de la presión que ella misma ha ejercido para mejorar la paridad de su equipo, Eslovenia acaba de cambiar a su comisario. En lugar de Tomaz Vesel, expresidente de su Tribunal de Cuentas, el Gobierno de Lubliana ha mandado a la diplomática Marta Kos. Pero la candidatura todavía no es firme puesto que necesita el visto bueno del Parlamento esloveno.
«El Gobierno esloveno ha informado a la Comisión que el Parlamento esloveno dará su opinión sobre la candidata propuesta para el puesto de comisaria el viernes. Sólo después de este paso se completará y oficializará la nominación del candidato», se ha justificado el portavoz de Von der Leyen, Eric Mamer.
[Von der Leyen sopesa dar a Teresa Ribera la codiciada cartera de Competencia y alejarla de Transición]
«Basándose en esto, la Comisión ha pedido a la Eurocámara posponer la presentación de la composición del colegio por parte de la presidenta Von der Leyen hasta que la lista de nominados esté completa», explica el portavoz. De forma provisional, se ha convocado una nueva cita de la conferencia de presidentes (órgano equivalente a la junta de portavoces del Congreso) para el próximo martes 17 de septiembre en Estrasburgo.
El mandato del actual Ejecutivo comunitario caduca el próximo 31 de octubre, y el retraso en el reparto de carteras podría obligarle a seguir en funciones durante un periodo indeterminado. La primera Comisión Von der Leyen ya sufrió una demora de un mes por los problemas a la hora de ratificar al colegio en la Eurocámara.
Von der Leyen se enfrenta a un complicado ejercicio en el reparto de carteras. No sólo debe tener en cuenta la competencia y la experiencia de los diferentes comisarios, sino que además debe respetar toda una serie de equilibrios geográficos, políticos y de género.
Un ejemplo de las dificultades que está experimentando la presidenta es el caso de la candidata española, Teresa Ribera. Desde el principio se dio por descontado que le adjudicaría una vicepresidencia responsable de todo lo relacionado con la transición verde, dado que ella es una experta en la materia y a la vez la principal representante de la familia socialista en el equipo de Von der Leyen.
Sin embargo, la alemana sopesa ahora dar a Ribera la codiciada cartera de Competencia (quizá la que tiene más poder directo en Bruselas) con el fin precisamente de alejarle de Transición Ecológica. El motivo sería que el Partido Popular Europeo desconfía del «activismo» la española y prefiere que el control del Pacto Verde Europeo lo tenga un comisario de los suyos, según ha publicado el Financial Times.
El otro gran problema al que se enfrenta Von der Leyen es el de la paridad de género. Con el cambio de Eslovenia, la alemana tendrá un colegio de comisarios de 10 mujeres y 16 hombres. Una vez se haga público el reparto de carteras, los candidatos a comisarios deben pasar el examen de la Eurocámara en una audiencia pública. Al final, el colegio en su conjunto debe ser ratificado por mayoría simple en el Parlamento Europeo. La votación final estaba programada para la última semana de octubre, pero lo más probable es que se retrase a noviembre.
