Alberto Núñez Feijóo ha vuelto a demostrar su don de la oportunidad. Después del episodio del viernes, en el que el PP alquiló un palacete de bodas para celebrar su cónclave de barones autonómicos, este domingo Feijóo se ha aventurado a asegurar que el Gobierno de España no hace nada por ayudar a Venezuela, justo el mismo día en el que el Ejecutivo español, a través del Ministerio de Exteriores, ha concedido asilo político a Edmundo González, líder opositor, a petición suya.

Al viaje del selfie que el PP se niega a confirmar si se pagó con dinero público y en el que los representantes ‘populares’ no pudieron entrar en Venezuela, se suma la metedura de pata de hoy. El Gobierno español ha informado en la madrugada de este domingo de la acogida de Edmundo González, después de que éste abandonase Caracas en un avión de las Fuerzas Aéreas españolas a raíz de los problemas que enfrenta en su país de origen.

«Edmundo González ha despegado de Caracas en dirección a España en un avión de las Fuerzas Aéreas españolas. El Gobierno de España ha dispuesto los medios diplomáticos y materiales necesarios para su traslado, realizado a solicitud suya», reza el comunicado publicado por el Ministerio de Exteriores de España.

El Gobierno ha reiterado su «compromiso con los derechos políticos y la integridad física de todos» los ciudadanos de Venezuela, haciendo hincapié en sus líderes políticos. Según ha escrito el titular ministerial, José Manuel Albares, esta acogida se ha producido a petición del propio líder opositor.

 


El PP fue informado de que no podría entrar a Venezuela

Recordando el viaje del PP a Venezuela, donde se les impidió el acceso, el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación aseguró que tanto la mesa del Senado como el Grupo Parlamentario Popular fueron informados de la negativa de las autoridades venezolanas de acudir como misión de observación electoral a Venezuela.

Así lo confirmaron fuentes del Ministerio que dirige José Manuel Albares después de que los 10 parlamentarios del Partido Popular que aterrizaron en Caracas invitados por la oposición como observadores en las elecciones fueran expulsados del país. Tanto la mesa del Senado como el GPP solicitaron poder acudir como misión de observación electoral a Venezuela. El Ministerio de Exteriores «no vio ningún inconveniente» en esta solicitud, y trasladó y realizó todas las gestiones ante las autoridades venezolanas para ello. Sin embargo, las autoridades venezolanas denegaron la autorización, decisión de la que Exteriores informó a los solicitantes. Sin embargo, el PP decidió seguir adelante y el Gobierno venezolano se mantuvo firme en su decisión. «Todo ello se informó al Senado y al GPP, incluida la inadmisión por parte de Venezuela de esta solición, razón por la que todos los grupos políticos, excepto el PP, decidieron no realizar el viaje», expuso el Ministerio.

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