Lapili (Ciudad Real, 1994) triunfó en Factor X y se bajó del torbellino del éxito para labrarse una carrera en la industria de la música. Tras trabajar en Ghana o Londres, publica ‘Piligrossa’, su primer disco. Artista multidisciplinar que aborda diferentes aspectos como la música, la danza o el arte textil, es responsable de la fiesta Bompa Party y de la marca de ropa upcycle Hand made by Lapili.
En Muslona (2018), su primer single, convertido en himno reggaetonero para la aceptación de todos los cuerpos, Beauty Brain sampleó el choque de sus propios muslos. Luego vinieron el dembow de No Depilada junto a Bejo o el afrohouse de Ocupada junto a Bryte, con un videoclip grabado en Ghana con artistas locales que reivindica la inspiración que los ritmos de West Africa tienen en su trabajo.
Su primera mixtape Peligro de Extinción (2020), producida en su mayoría por GuiltyBeatz, son siete temas que fusionan géneros afro y caribeños que incluyen la colaboración Flecha con el trapero Ghanien Kofi Mole y Dansalina con Pappy Koko. También sale su colaboración Kanzo junto a la artista Ghanien Sister Deborah.
Durante 2021 continua sacando singles como el dembow Kitty Fat, el afro- beat Chilli Pepper junto al cantante Ghanien Twitch 4EVA, Independent Gyal, Lapoli junto a Bejo o Warrindonga producido por Kabasaki.
En 2023 publica Piligrossa, un disco-cuento con interludios entre canciones en la mejor tradición de las orquestas de foso de teatro. Y este año acaba de publicar Sexina, una obra que plantea muchas cuestiones diferentes entorno a la sexualidad femenina y como se percibe socialmente
P: Sexina aborda temas complejos relacionados con la sexualidad femenina, la hipersexualización y el empoderamiento. ¿Qué te motivó a explorar estos temas a través de la música y qué impacto esperas que tenga en quienes escuchen el álbum?
R: La experiencia personal. Casi todo lo que escribo tiene que ver mucho con el momento que estoy pasando en el presente y en ese momento estaba viviendo muchas situaciones personales que me conectaban con esas cuestiones.
P: Sexina es un alter ego, como lo fue Piligrossa. ¿Qué aspectos de tu identidad o experiencias personales se ven reflejados en este nuevo personaje, y cómo se diferencia de los anteriores?
R: Piligrossa es como la parte mas de buscar conexión con una misma comparten muchas cosas en común ella y Sexina porque las dos son guerreras. Pero al final Sexina no deja de ser una asesina del sexo, cada una tiene lo suyo.
P: El baile es una herramienta central en tu trabajo. ¿Cómo crees que el movimiento y la danza complementan y amplifican el mensaje que transmites en Sexina?
R: Para mi el bailar es algo super sanador y que te lleva a estar contigo, a darle gracia al cuerpo, dar gracias… Es otro lenguaje diferente, sin palabras, pero también expresa.
P: Tu carrera ha sido bastante diversa, abarcando desde la música hasta la moda y la danza. ¿Cómo han influido estas diferentes disciplinas en la forma en que abordas la creación de un proyecto como Sexina?
R: A mi me gusta hacer muchas cosas diferentes y al final pues me involucro de todas esas formas en un proyecto. Es una de las mejores partes de la música que te da un abanico muy grande porque permite muchas disciplinas diferentes
Mirando hacia el futuro, ¿cómo ves la evolución de tu sonido y tu identidad artística después de Sexina?
P: Dentro de nada sale otro proyecto muy diferente a lo que yo haya hecho nunca. Hay otros temas o ideas que te gustaría explorar en proyectos futuros?
R: Traigo algo que fusiona el folklore de donde yo nací con los estilos de música que normalmente hago. Este proyecto es super opuesto a Sexina, estoy saliendo de la sexina era para entrar en la era manchega.
