En la madrugada de este domingo, Edmundo González Urrutia ha abandonado Venezuela en un avión de las Fuerzas Aéreas Españolas en dirección a España en calidad de asilado. El opositor venezolano, que llevaba semanas sin dejarse ver ante la persecución iniciada por el régimen de Nicolás Maduro, solicitó asilo al Gobierno de España, el cuál se lo ha concedido. Tras su salida del país, el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha afirmado que «es un día triste para la democracia en Venezuela» y ha dado algunos datos que permiten trazar los últimos movimientos de González Urrutia en el país latinoamericano.
Tras las elecciones celebradas el pasado 28 de julio, el Consejo Nacional Electoral (CNE) dio como ganador de las elecciones presidenciales del país latinoamericano a Nicolás Maduro, que consiguió un 51,20% de los votos según sus datos. Sin embargo, no han hecho públicas las actas electorales, mientras que la oposición creó una página web en las que publicó copias de las mismas. Aunque no están todas, los datos dan la victoria a González Urrutia.
No obstante, la Justicia venezolana ha puesto al opositor en el punto de mira, llegándole a acusar los delitos de «usurpación de funciones», «asociación, sabotaje, conspiración», «forjamiento de documentos públicos» e «instigación a la desobediencia de las leyes». Durante todo este tiempo, Gónzalez Urrutia ha permanecido escondido, sin acudir a las distintas citaciones de los juzgados ni participar en ningún acto público.
Borrell ha explicado que desde el día posterior a los comicios y hasta el pasado jueves, día 5 de septiembre, estuvo en la embajada de Países Bajos en Caracas. El propio ministro de Exteriores neerlandés, Caspar Veldkamp, ha explicado que decidió atender una petición «urgente» el día después de las elecciones para acoger al opositor durante «todo el tiempo que fuese necesario». Y durante casi un mes esta embajada ha sido la residencia de González Urrutia.
La salida del país
Fue el pasado jueves cuando, según Borrell, el opositor venezolano tuvo que «pedir asilo político y aceptar la protección que le ofrece España». El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, ha admitido que el candidato opositor llevaba «un tiempo» en la residencia del embajador español, mientras que la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, ha hablado de «varios días».
Finalmente, durante esta madrugada, González Urrutia se ha subido a un avión de las Fuerzas Aéreas para viajar a España. A media mañana, el avión ha hecho una escala en el archipiélago portugués de Azores, para continuar su viaje después hacia España.