El hasta ahora socio del Partido Popular, Vox, ya en la bancada de la oposición en las Cortes, entrará este martes al ataque al Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco, que afronta el curso político en solitario, con una batería de preguntas en el primer pleno que encabeza la acogida a menores no acompañados, precisamente el que fuera el motivo de la ruptura del pacto de gobierno y la salida de Vox de los bancos azules.
Será la primera vez que, públicamente y en el hemiciclo, los ultras y los populares se vean las caras desde que partieran peras en julio y los de Abascal, que sin embargo conservan la Presidencia del Parlamento autonómico, no perderán la oportunidad de hacerlo notar por lo que se deduce de las preguntas registradas.
Los principios, los menas y los agricultores
“¿Está dispuesto el gobierno de la Junta de Castilla y León a seguir recibiendo a los calificados como ‘menores extranjeros no acompañados’ en nuestra Comunidad?”, preguntará David Hierro, aclamador habitual del ya exvicepresidente, Juan García-Gallardo, ahora reconvertido en portavoz del Grupo de ultraderecha.
Pero será el propio Gallardo Frings quien abra el fuego contra Mañueco preguntándole al inicio de la sesión a su exsocio: “¿Qué principios van a guiar al Gobierno regional en lo que resta de legislatura?”, muy en la línea de la pregunta del líder socialista, Luis Tudanca, que precede la suya cuestionando también a Mañueco: “¿Cómo afronta los retos de Castilla y León con un gobierno en minoría?”.
Después de Gallardo y Hierro, seguirán levantando la voz desde los escaños de extrema derecha hasta un total de cinco ocasiones para interpelar al Gobierno del que ya no forman parte sobre agricultura y ganadería y cultura, es decir, áreas que hasta ahora dirigían.
Así, cuestionarán al consejero de Medio Ambiente sobre si va a seguir favoreciendo la “proliferación excesiva de parques eólicos y fotovoltaicos” y si “tiene previsto el Gobierno de la Junta de Castilla y León volver a asfixiar a los trabajadores del campo, como antes de la entrada de VOX en el gobierno regional”.
La Pirámide de los Italianos
La última pregunta de Vox pretende que Mañueco se posicione sobre la polémica Pirámide de los Italianos, el monumento franquista que el entonces consejero de Vox, Gonzalo Santonja, —y aún consejero, puesto que él se negó a abandonar el cargo cuando el gobierno se rompió— impulsó como Bien de Interés Cultural para garantizar su protección y escapar así de la Ley de Memoria Democrática.
“¿Qué medidas se están desarrollando por parte de la Junta para mejorar las condiciones de seguridad, promoción y puesta en valor de los bienes declarados de interés cultural por el gobierno de la Junta de Castilla y León durante la presente legislatura?”, preguntará el procurador Miguel Suárez Arca.
Teniendo en cuenta que el consejero responsable de Cultura y hacedor de la declaración de BIC sigue siendo el mismo, caben pocas dudas de que esa pregunta ni siquiera necesite respuesta.
Precisamente, el monumento de Burgos ha vuelto a la actualidad hace unos días de la mano del PSOE, que aprovechando la ruptura del tándem Mañueco-Gallardo, presiona al presidente para que demuestre un distanciamiento real de la ultraderecha en lo que Tudanca llama “la prueba del algodón”.
“Hay muchas pruebas del algodón pero hay dos que vamos a llevar en forma de iniciativas a las Cortes en las próximas semanas”, avanzó Tudanca citando, entre ellas, la solicitud de anulación de la declaración como BIC de la Pirámide fascista.
La batalla dialéctica entre los hasta ahora estrechos aliados está servida, si bien es de imaginar que el presidente, que ha anunciado una ronda de conversaciones buscando apoyos para sacar adelante el último año y medio de legislatura y, sobre todo, los presupuestos autonómicos para 2025, sea comedido en las respuestas. Aunque con Mañueco, nunca se sabe.
