Hace unos días una pareja de turistas ingleses tuvo que ser rescatada en plena noche en el monte Castrove, en Poio, al perderse por seguir las erróneas indicaciones del GPS. Camiones de gran tonelaje quedan a menudo «encerrados» en los estrechos viales de Leborei, en Cerponzóns, al seguir las instrucciones de este sistema. Y no han sido pocos los coches que han quedado atascados en las escaleras de la plaza de A Perrería, en Pontevedra, por culpa de un aparado sin actualizar, que no refleja que esa zona es peatonal.

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