Alberto Núñez Feijóo y los presidentes autonómicos del PP acordaron “ir todos a una” en el debate abierto en canal sobre financiación a raíz del pacto entre el Gobierno y los independentistas para un concierto catalán. El líder conservador compareció con todos los barones territoriales detrás asegurando que “no caerán en una bilateralidad tramposa” en lo que se refiere al sistema de financiación y reiteró la exigencia “de que se abandone el cupo independentista”. Además, el líder del PP avanzó una propuesta para que el Ejecutivo inyecte a todas las comunidades hasta 18.000 millones de euros de los fondos europeos que no se han ejecutado.
Según explicó Feijóo esa inyección es posible “descentralizando una parte de los fondos europeo” de los que dispone España y que el Gobierno “no ha sido capaz de ejecutar”. La petición incluye que “a medida que se identifiquen otros remanentes que no se han ejecutado”, éstos sean transferidos a las autonomías para que puedan invertir más en la prestación de servicios públicos.
Como publicó este periódico lo que la cumbre del PP no iba a arrojar era un documento con una propuesta concreta sobre el modelo de financiación con sello de los conservadores. El objetivo siempre fue escenificar un frente contra Sánchez y, sobre todo, el pacto fiscal con los independentistas. En ningún caso el PP abrirá el modelo de fijar los criterios del futuro sistema, lo que obligaría a todos sus presidentes autonómicos a ponerse de acuerdo. El PP quiere que sea el Ministerio de Hacienda el que haga ese trabajo.