Bajo un fuerte dispositivo de seguridad para dificultar la toma de imágenes del detenido y la labor informativa de los medios de comunicación congregados a las puertas del Juzgado de Instrucción número ocho de Llíria, el futbolista Rafa Mir ha llegado a los juzgados esposado y custodiado por la Guardia Civil. Se le acusa de una doble agresión sexual agravada a una joven de 21 años y otro delito contra la libertad sexual de una segunda víctima. Asimismo, un amigo del delantero murciano también detenido tendrá que declarar ante el juez por las lesiones causadas a una de las agredidas.
Tras permanecer dos noches en los calabozos de la Comandancia de la Guardia Civil de la calle Calamocha de València, a las 10.15 horas Rafa Mir ha sido conducido hasta los juzgados de Llíria.
Los hechos por los que tendrá que responder ante la Justicia Rafa Mir se produjeron la mañana del pasado domingo en el domicilio del futbolista, en la urbanización Torre en Conill de Bétera. La noche anterior el delantero cedido por el Sevilla F. C. había conocido a dos jóvenes en una conocida discoteca de València, como informó ayer Levante-EMV. En torno a las siete de la mañana tras abandonar el local les dijo de seguir la fiesta en su casa y las convenció para que se subieran a un taxi con él dirección a Bétera.
A esta fiesta privada en el domicilio del futbolista se sumaron otros dos jóvenes amigos de Rafa Mir, entre ellos el segundo detenido por la Guardia Civil.
El letrado de Rafa Mir, Jaime Campaner, no ha querido detenerse a hacer declaraciones a su llegada al juzgado pero ha insistido en que su representado niega las agresiones sexuales y asegura que se trató de relaciones consentidas.
Los hechos denunciados
Si bien con una de las denunciantes sí mantuvo sexo consentido en un primer momento en una de las habitaciones del inmueble, la segunda denuncia que tras tener sexo con su amiga el futbolista la arrojó a la piscina y le agredió sexualmente, primero en el agua y posteriormente en un baño de la casa, al que presuntamente la habría introducido Rafa Mir por la fuerza.
Tras estas presuntas agresiones, denunciadas por la víctima, la otra joven salió de la habitación y se enzarzó en una discusión por lo que le habían hecho a su amiga. Fue entonces cuando el segundo arrestado por la Guardia Civil la habría agredido causándole lesiones en el labio.
El futbolista y sus amigos las tiraron de malas formas a la calle semidesnudas, lo que fue visto por un vecino que alertó a la Policía Local de Bétera y a la seguridad privada de la urbanización.