Las bicicletas en España siguen ganando adeptos y no son pocas las personas que las conducen por ocio o porque no les queda otra. Es un medio de transporte relativamente barato y que, además, te ayuda a estar en forma. Sin embargo, es crucial que los ciclistas también sepan las normas de tráfico, pues son un vehículo más.
Por ello, aquí se detallan algunas de las multas más típicas que se le suelen poner a los ciclistas en España. De hecho, una de ellas te puede costar hasta 1.000 euros, por lo que deberías conocerla.
1. Saltarse un semáforo en rojo
Es una de las infracciones más típicas entre los ciclistas. No es para nada extraño ver en las ciudades a los ciclistas no respetar un semáforo en rojo. La multa por hacerlo es de 200 euros.
Pese a que parece algo obvio, muchos ciclistas se suelen olvidar de que también tienen que respetar esto, lo cual puede causar problemas de seguridad vial.
2. Utilizar el teléfono móvil o los auriculares en la bicicleta
Como hemos dicho, las bicicletas son un vehículo más en las vías, por lo que tampoco se les permiten las distracciones. Usar un teléfono mientras vas en bici es una enorme distracción que puede provocar un accidente.
Por el otro lado, los auriculares también son una distracción, además de que disminuyen tu capacidad para escuchar y estar atento a la carretera. Por ello, el teléfono y los cascos no tienen cabida en la bici ni en el coches, ya que te pueden sancionar con 200 euros.
3. Circular sin luces y sin reflectantes
Si eres ciclista y te gusta hacer rutas por las noches, debes saber que es totalmente obligatorio llevar luces y reflectantes a estas horas. De hecho, en condiciones de poca visibilidad también debes llevar estos elementos. De lo contrario, la multa puede ser de 200 euros y es crucial, tanto para ti como para el resto de conductores.
4. Ir por zonas en las que un ciclista no puede circular
Los ciclistas tienen ciertas zonas en las que está prohibido que circulen. Entre esas zonas se encuentran las autovías y autopistas, suponiendo una infracción de unos 500 euros.
Tampoco pueden circular por zonas peatonales ni aceras, lo cual es sancionable desde los 60 hasta los 200 euros. No obstante, si alguna ordenanza municipal sí que lo permite no habrá ningún problema.
5. Conducir la bici estando borracho
El consumo de alcohol y drogas sigue siendo la cuenta pendiente de la DGT y Guardia Civil en nuestras carreteras. Son los accidentes más comunes y los ciclistas, como es lógico, tampoco pueden conducir su bici en este estado.
De hecho, muchos usuarios piensan que a los ciclistas no se les puede hacer controles de alcoholemia y esto no es correcto. Es más, los ciclistas tienen el mismo nivel en los controles que los conductores de coches o motos. Por ello, si conduces la bici borracho te puedes enfrentar a multas de hasta 1.000 euros.