En 2019, la Ruta de la Garnacha diseñó un plan de acción cuyo objetivo era el de lograr unas directrices que seguir a la hora de conservar y mantener uno de los patrimonios materiales más emblemáticos de nuestra cultura del vino: las bodegas en cerro, también conocidas como cuevas vinarias.
Inicialmente, el plan tenía una duración de tres años, 2019-2021, sin embargo, la pandemia y una posterior falta de recursos económicos para dar continuidad al mismo, hizo que tuviera que esperar mejores tiempos.
Se dieron los primeros pasos con la celebración de varias mesas de trabajo abiertas al territorio, en algunas ocasiones limitada a un perfil concreto (político y/o empresarial) y en otras abiertas a la ciudadanía en su conjunto.
Ha sido un trabajo ambicioso, y a su vez clave, ya que la estrategia ha sido buscar el compromiso de municipios dispuestos a apostar por el proyecto; en definitiva, la recuperación de buena parte de su arquitectura popular vía sus bodegas. Un patrimonio no exento de notoriedad pues forma parte del identitario del territorio y de La Ruta del Vino La Garnacha. Un patrimonio material y a su vez inmaterial, recuerdo popular de nuestras gentes, de nuestros antepasados.
A lo largo de estos años, el plan de trabajo se ha solapado con acciones de concienciación y sensibilización, entre las que se han incluido, con la colaboración de aquellos municipios que así lo han solicitado, limpiezas de algunos cerros que acoge este patrimonio arquitectónico, con informes detallados de los residuos extraídos, cantidades y recomendaciones a las entidades locales.
Presentación del estudio
El 15 de junio, y con motivo del izado de la Bandera Verde en Tabuenca, se presentó una publicación, editada por Mura Estudio, con todo el trabajo realizado y los conocimientos adquiridos, vía procesos participativos, proyectos pilotos, casos de éxito en otros territorios y junto con el asesoramiento de técnicos que han participado. Además, y como una parte de las más relevantes, se incluye una guía de buenas prácticas en la conservación y mantenimiento de las bodegas en cerro.
Dicha publicación, a fecha de hoy única en el territorio, tanto por sus contenidos como recomendaciones a la hora de recuperar y mantener dicho patrimonio, va dirigida principalmente a las entidades locales cuyos municipios albergan bodegas en cerro. Tal y como viene a indicar la guía, este trabajo facilitará la labor de estas instituciones comprometidas con la conservación del patrimonio pues con ella, en mano, podrán prescindir, en buena parte, de consultorías externas y trabajar directamente con las directrices expuestas, desde la planificación hasta la ejecución.