Repsol ha cancelado la venta de su negocio en Noruega, según una información de ‘Reuters’, por lo que la firma descarta una operación que estaba valorada en aproximadamente 1.000 millones de dólares (923 millones de euros) después de seis meses buscando un comprador.
Las fuentes consultadas por la agencia británica aseguran que la firma se centra ahora en dar salida a otros activos, mientras planea fusionar sus operaciones en el Mar del Norte con NEO Energy. La compañía también estudia la venta de una participación minoritaria en su negocio de energías renovables a la petrolera estatal Saudi Aramco.
Hasta la fecha, Repsol estaba trabajando con el banco de inversión Rothschild para llevar a cabo la venta de 10 activos ubicados en la plataforma continental en Noruega, que consta de siete campos productores con reservas netas de 53 millones de barriles diarios de equivalente en petróleo (el 36% de ellos gas) y una producción neta en 2024 de 29 millones de barriles de petróleo por día (mbped).
La compañía presidida por Josu Jon Imaz opera en Noruega desde 2003 y ha desarrollado su actividad petrolera y gasística en alta mar a través de su subsidiaria Repsol Norge.
El último plan estratégico presentado por la compañía contempla inversiones totales por valor de hasta 26.000 millones de euros, y la firma espera financiar estas operaciones parcialmente a través de la rotación de cartera y de la venta de activos por un monto de 4.000 millones de euros.
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