Las condiciones de trabajo de los miembros del operativo de incendios forestales de Castilla y León vuelven a estar sobre la mesa un año más tras el anuncio de CCOO de la presentación de una denuncia ante la inspección de trabajo a consecuencia de lo que consideran incumplimientos en materia de prevención de riesgos laborales.

En concreto, Juan Carlos Hernández, José Ramón Jiménez y Raquel Martín, técnico y responsables, respectivamente, del sector autonómico y salud laboral, señalan este martes como “inaceptable” que la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León deniegue a los trabajadores “la aplicación de la Ley de Riesgos Laborales” en lo que se refiere a los riesgos de las sustancias cancerígenas que se liberan durante un incendio, entre las que citan “hidrocarburos y compuestos orgánicos volátiles y persistentes” que quedan prendidos en sus equipos de protección (EPIs).

Reclaman lavadoras y vestuarios

CCOO reclama bases operativas en las que existan lavadoras y vestuarios que permitan a bomberas y bomberos cambiarse de ropa antes de regresar a sus domicilios y denuncia carencias importantes en las infraestructuras que no permiten tratar los contaminantes, de modo que, en numerosas ocasiones, los trabajadores forestales se ven obligados a lavar en sus propias casas sus equipos de trabajo.

El sindicato señala que el Gobierno autonómico tiene firmado un contrato con una empresa aragonesa para el lavado de los equipos en sólo dos o tres ocasiones a lo largo de la temporada, algo que consideran insuficiente, puesto que los forestales que han trabajado en un incendio se ven obligados a seguir utilizando esas ropas contaminadas con las sustancias provenientes del humo y la combustión de materiales que continúan inhalando y llevan pegadas a su piel.

Categoría 1 en peligrosidad

CCOO explica que recientemente, las normas internacionales declararon al colectivo de trabajadores en prevención y extinción de incendios forestales como Categoría 1, es decir, máxima peligrosidad en el riesgo de exposición a agentes cancerígenos, equiparándolos, por ejemplo, a las personas que trabajan con amianto.

Según la información facilitada por la central sindical, los responsables de Medio Ambiente en el Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco, sin embargo, “hacen caso omiso e, incumpliendo la normativa de la autoridad laboral y la inspección de trabajo, les obligan a llevar puestos los EPIs cuando no están atendiendo a un incendio”, lo que consideran pone en riesgo la salud de los trabajadores de forma innecesaria.

Añaden que dictámenes de la Comisión Nacional de Seguridad e Higiene en el trabajo al respecto no se aplican en Castilla y León, y que tampoco se evalúan los riesgos, a pesar de que a ello obliga una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

Entiende CCOO que la Consejería de Medio Ambiente debería de adoptar una actitud ejemplarizante, puesto que si no cuida esta normativa con respecto a sus propios trabajadores, tampoco lo harán las empresas que subcontratan a buena parte de los miembros del operativo.

“La argumentación de que es una emergencia de protección civil para denegar la aplicación de esta normativa”, señala Hernández, “es falaz”.

Fuente