La última semana de mercado no es nada tranquila en las oficinas del Deportivo. Entradas y salidas, dudas en torno al futuro de algunos futbolistas y el objetivo de completar la mejor plantilla posible para Imanol Idiakez. En esa carrera de idas y venidas, trenes y vuelos, presentaciones y despedidas, Berto Cayarga ha dado el pistoletazo inicial al tramo final de la operación salida. Después de permanecer julio y agosto en el plantel del técnico vasco, club y jugador llegaron a un acuerdo amistoso para su marcha. Su futuro pasa por el Real Unión de Irún, un club que milita en Primera RFEF y al que llegará gratis tras desvincularse. Las buenas relaciones entre ambas partes han permitido que el acuerdo perjudicase lo menos posible al límite salarial de los coruñeses. No será el único en abandonar el barco esta semana.
Quedan tres días para el cierre del mercado. El viernes 30 será la fecha final. La línea para sellar las bases del equipo que deberá pelear por esos famosos 50 puntos que ya citó Idiakez. Y algo más si es posible. El club espera, al menos, dos incorporaciones más: el delantero y el extremo. Será una pelea a varias bandas, porque muchos equipos de Segunda están a la caza de lo que pueda llegar desde Primera o aquellos jugadores libres que todavía no se han decidido.
En la plantilla deportivista hay varios jugadores en un limbo a la espera de resolver su futuro. Uno de ellos es Raúl Alcaina. El ariete lleva tiempo en la rampa de salida. Jugará cedido en Primera RFEF para poder probarse y ganar la continuidad que en A Coruña no tendrá, menos con el fichaje que llegará y completará la delantera, junto a Barbero y Lucas. El delantero nacido en Museros no está inscrito en La Liga y podría ser el próximo en salir. De momento, se ejercita junto al resto de sus compañeros, al mismo ritmo, para no perder el tiempo y estar en la mejor forma posible. Sería la sexta cesión, junto a Martín Ochoa (Lugo), Mario Nájera (Logroñés), Diego Gómez (Arenteiro), Pablo Muñoz (Marbella) y Brais Suárez (Calahorra).
El otro caso es el de Iano Simao. Con la llegada de Obrador (y Escudero, quien ya trabaja sobre el césped) se ha quedado sin sitio en el lateral izquierdo. En su caso tiene cartel gracias a su rendimiento con el Fabril y podría seguir la misma ruta que muchos de sus compañeros y jugar en Primera RFEF. Un escalón intermedio después de unos meses en el primer equipo en los que apenas ha contado con un puñado de minutos. En enero firmó un contrato hasta 2026, cuando tenía opciones de salir al fútbol portugués, abandonando definitivamente el Fabril.
En principio, no se esperan más salidas, aunque el mercado dictará las necesidades finales y alguna llegada extra de última hora podría cambiar la situación de otros futbolistas que han tenido menos participación con el primer equipo. En ese margen se encuentran jugadores como Hugo Rama o Davo, aunque ambos se ven con motivación para pelear por un sitio y no contemplan abandonar el club coruñés a estas alturas de mercado. Las cesiones de Iano y Alcaina podrían ser las últimas de un mercado ajetreado que ya llega a su final.