Rusia ha revelado imágenes que muestran en acción sus torres antiaéreas, similares a las estructuras Flakturm de la Alemania nazi, utilizadas para interceptar drones suicidas ucranianos en la región de Moscú.

Los medios de comunicación rusos difundieron imágenes de estas torres apuntando a los drones que cada vez representan una mayor amenaza para la capital. El alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, resaltó la efectividad del sistema de defensa aérea de la ciudad, afirmando que las fuerzas rusas lograron interceptar y derribar diez vehículos aéreos no tripulados (UAV) ucranianos que se dirigían hacia Moscú.

Sobianin detalló estos incidentes a través de su cuenta de Telegram, precisando que los drones fueron abatidos en el distrito de Podolsk, situado al sur de la capital rusa. “No se han reportado víctimas ni daños”, afirmó el alcalde, subrayando la magnitud del ataque como uno de los más significativos en tiempos recientes.

Estas posiciones antiaéreas, reforzadas con sistemas Pantsir-S1 sobre estructuras elevadas, comenzaron a ser vistas por primera vez hace alrededor de un año. La elevación de las plataformas aumenta el alcance del radar, lo que permite una detección más eficaz de objetivos voladores a baja altura desde distancias mayores.

La estrategia de instalar sistemas de defensa en torres no es novedosa; se asemeja a las tácticas de defensa empleadas por la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial. Las Flaktürme, o Torres Antiaéreas, eran imponentes fortalezas terrestres diseñadas para defenderse de los ataques aéreos de los aliados.

El reciente despliegue de estas defensas modernas, inspiradas en las Flakturm, refleja los esfuerzos continuos de Rusia por fortalecer su defensa aérea frente a las crecientes amenazas de las fuerzas ucranianas.



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