En la Franja de Gaza, parece que las noticias se repiten. Los palestinos de Gaza han vuelto a lamentar el bombardeo de otra escuela que servía de refugio. Los hechos se repiten, pero son otras vidas perdidas para siempre. Esta vez ha sido en un centro educativo al norte del campo de Nuseirat, en el centro del enclave palestino. Varias personas, incluidas mujeres y niños, han muerto y han resultado heridas en una realidad que, por más que se repita tras 325 días de guerra, no deja de ser desgarradora. Además, la última instalación médica en funcionamiento en el centro de Gaza, el Hospital de los Mártires de Al Aqsa, ha tenido que evacuar a sus cientos de pacientes y palestinos desplazados después de la última orden del Ejército israelí.
Los bombardeos se multiplican a lo largo y ancho de la Franja de Gaza. Un cuentagotas de vidas arrasadas que engrosan la trágica cifra de 40.435 muertos desde el pasado 7 de octubre. La artillería israelí ha bombardeado el noroeste del campamento de Bureji, en el centro del enclave. Los helicópteros han disparado hacia las cercanías de la fábrica Al Awda en la calle Salah al Din, al este de Deir el Balah. En esta ciudad central, dos palestinos han perdido la vida en el enésimo ataque israelí. También en Rafah, en el extremo sur de la Franja, las fuerzas hebreas han volado bloques residenciales y edificios al oeste de la urbe. La Defensa Civil ha lamentado la muerte de siete personas en la ciudad de Gaza.
Por su parte, el Ejército israelí presume de haber atacado este domingo el lugar desde el cual Hamás lanzó un cohete hacia el centro del Estado hebreo. Además, afirma haber «eliminado» docenas de luchadores palestinos y «grandes cantidades de armas» en las áreas de la sureña Jan Yunis y la central Deir el Balah. En esta última ciudad, las autoridades militares han lanzado una nueva orden de evacuación, provocando el desplazamiento de miles de palestinos por enésima vez. Las órdenes de evacuación llegan casi a diario en todo el territorio gazatí, reduciendo las llamadas zonas seguras por decenas de kilómetros en cada ocasión. Pese a la huida de pacientes y desplazados, el Hospital de los Mártires de Al Aqsa, la última instalación médica en funcionamiento en el centro de Gaza, seguirá en marcha.
Acuerdo parcial
Israel tampoco ha detenido sus acciones en el Líbano, donde este fin de semana se ha concentrado toda la tensión después del mayor choque entre el Ejército hebreo y la milicia Hizbulá en dos décadas. En la ciudad costera de Sidón, un presunto ataque con aviones no tripulados israelíes ha herido de gravedad a un funcionario de Hamás, aunque, por ahora, parece haber sobrevivido a la agresión. Este domingo las conversaciones por un alto el fuego en El Cairo terminaron sin avances. El periódico qatarí Al Araby Al Jadeed informa que se ha presentado una nueva propuesta que contemplaría un acuerdo parcial sobre la primera fase del alto el fuego, mientras que las negociaciones sobre los aspectos restantes de un acuerdo global se llevarían a cabo en una etapa posterior.
En paralelo, los mediadores también están trabajando para alcanzar una tregua humanitaria de entre cuatro y siete días para distribuir vacunas contra la polio y otros tipos de ayuda. Israel entregó vacunas para 1,255 millones de personas a través del cruce de Kerem Shalom el domingo, días después de que se identificara un caso de polio en Gaza por primera vez en 25 años. Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como UNICEF, la agencia de Naciones Unidas para la infancia, han pedido que los combates en Gaza se detengan durante al menos siete días para vacunar a unos 640.000 niños. La Administración estadounidense, a su vez, está presionando a Israel y Egipto para que reabran el cruce fronterizo de Rafah lo antes posible, según informa el medio qatarí.
