A última hora de ayer viernes Roger Torelló contaba en MD la doble operación de Clément Lenglet con el FC Barcelona. Por un lado, la renovación del contrato con el equipo azulgrana, extendiendo la duración del mismo del 2026 al 2027, y posteriormente su cesión al Atlético de Madrid para esta misma temporada. Una doble operación que le reporta al Barcelona más margen en su lucha titánica por lograr el espacio suficiente para poder inscribir a jugadores y llegar a la regla anhelada del 1/1 que le pudiera incluso lanzarse al mercado a firmar otros fichajes este verano antes de su conclusión del 30 agosto.
Vamos por partes. Como ya explicamos en MD este pasado jueves, el salario del central francés rondaría los 16 millones de euros brutos por temporada (8 millones netos). Con esta ampliación de contrato de dos a tres años estos 32 millones brutos (16 netos) se reparten en tres temporadas. Esto supone que el francés pasaría a cobrar 10,6 millones brutos por temporada, unos 5,3 netos por temporada.
Lee también
Esto supone que el Barcelona reduce en 6 millones el gasto previsto inicialmente para el francés esta temporada además de ampliar la amortización de contrato para las próximas cuatro temporadas en lugar de las dos previstas inicialmente. Esto supone un paso importante en la búsqueda por alcanzar el mencionado 1/1.
Y luego está lo que reporta la cesión del jugador al Atlético de Madrid que además asumiría gran parte de la nueva ficha del central que, como acabamos de contar, estará en torno a los 10,6 millones brutos por temporada.
Su inscripción es capital para un retorno por la cesión
Aquí el club si recibe un retorno en términos de fair play. Resulta capital para que esto sea posible que el jugador ya estaba inscrito además en la plantilla azulgrana como jugador de la primera plantilla.
Como ya explicamos en MD hace unos días, el margen es el 60% sobre el coste del salario y amortización. Partiendo de estos 10,6 millones anteriormente mencionados, 6,4 millones de euros de margen salarial que dejaría Lenglet si el Atlético de Madrid asume el total de la ficha. A partir de ahí, la cantidad irá descendiendo en función del porcentaje que no asuma el club rojiblanco y sea el Barcelona quien se la continúe pagando.
Puede darse incluso que este margen sea superior. Eso ahora mismo está condicionado a la masa salarial total de la primera plantilla del Barcelona. Cantidad que se acaba de aligerar con la salida de Gündogan. Si después de la renovación contractual, la ficha de Lenglet es igual o superior al 5% del total de la plantilla actual, entonces se convierten en los llamados jugadores franquicia.
En este caso el margen por la cesión ascendería a un 70% de la ficha del futbolista que asuma el Atlético de Madrid. El máximo sería 7,4 millones si los rojiblancos asumieran el 100% del salario del francés. Así pues, una doble operación que reduce su gasto en 6 millones en su camino por alcanzar este 1/1 y deja alrededor de 6 millones para poder utilizar en fichar o inscribir jugadores.
