El viernes por la noche, el Ministerio de Defensa de Siria acusó a Israel de llevar a cabo ataques aéreos en varios puntos del centro del país, devastado por la guerra bélico.

Según un comunicado del Ministerio, “aproximadamente a las 19H35 (16H35 GMT), el enemigo israelí lanzó una agresión aérea desde el norte del Líbano, apuntando a varios sitios en la región central”, y confirmó que siete civiles resultaron heridos en el incidente.

Un grupo de monitoreo de la guerra, conocido como el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, informó que estos ataques aéreos israelíes dirigidos contra posiciones del ejército sirio y de su aliado, el grupo libanés Hezbolá, resultaron en la muerte de tres combatientes proiraníes y dejaron a otros diez heridos. “Los ataques israelíes han matado hasta ahora a tres combatientes proiraníes y herido a otros diez”, declaró el Observatorio.

El Observatorio, con sede en Gran Bretaña, detalló que los ataques tuvieron como objetivos “estaciones de servicio improvisadas vinculadas a Hezbolá en la zona rural de Homs, además de depósitos de armas pertenecientes al grupo, y dos instalaciones del ejército sirio en la zona rural de Hama”. Cabe señalar que este grupo de monitoreo, que se apoya en una red de informantes dentro de Siria, ha enfrentado acusaciones en el pasado de exagerar las bajas del régimen sirio.

Desde el inicio de la guerra civil en Siria en 2011, Israel ha realizado cientos de ataques aéreos en territorio sirio, con el objetivo principal de debilitar a las fuerzas armadas del país y a sus aliados respaldados por Irán. La frecuencia de estos ataques aumentó significativamente tras el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre, que desencadenó la guerra en Gaza. Posteriormente, la intensidad de los ataques se redujo tras un ataque atribuido a Israel el 1 de abril, que impactó un edificio consular iraní en Damasco y provocó la muerte de dos generales de la Guardia Revolucionaria de Irán.

En las últimas semanas, las tensiones han vuelto a aumentar debido al asesinato de dos destacados combatientes apoyados por Irán el mes pasado, lo cual ha llevado a Teherán y sus aliados a emitir amenazas de represalias, culpando a Israel de estos incidentes.

A pesar de estas acusaciones y la escalada de violencia, las autoridades israelíes raramente comentan sobre ataques específicos en Siria. Sin embargo, han reiterado en varias ocasiones que no permitirán que Irán, su enemigo declarado, expanda su influencia y presencia en la región.



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