Durante la pasada madrugada, agentes del GOIA llevaron a cabo un control de Seguridad Ciudadana en la zona de Triana, que resultó en la detención de un individuo por un presunto delito contra la salud pública.
La operación fue un éxito gracias a la intervención del perro policía Kai, quien olfateó y detectó con precisión la droga en posesión del detenido, hallando medio kilo de polen de hachís. El eficaz trabajo de Kai fue clave para que los agentes pudieran llevar a cabo esta detención y evitar la distribución de la sustancia.