Robert F. Kennedy Jr, candidato independiente para las elecciones presidenciales de noviembre de Estados Unidos, ha anunciado este viernes que suspende su campaña por la Casa Blanca y ha dado su respaldo al republicano Donald Trump, que inmediatamante ha celebrado ese apoyo.
El movimiento del miembro de la famosa dinastía política, hijo de Bobby Kennedy y sobrino del expresidente JFK, se anticipaba desde hace días. Aunque hace unos meses habría podido tener un impacto fuerte en la carrera, cuando esta medía a Trump con el presidente Joe Biden, ahora los sondeos apuntan a que no afectará de forma sustancial al duelo que libran Trump y la nominada demócrata, Kamala Harris, pues su apoyo se construía sobre votantes potenciales de ambos. Si acaba ayudando a alguien, no obstante, potencialmente es a Trump.
El desmoronamiento
Kennedy, de 70 años y que llegó a obtener hasta el 10% de intención de voto en algunas encuestas, había visto cómo el respaldo caía en los últimos meses conforme las controversias lastraban su campaña. Si bien algunas de sus posiciones de partida eran polémicas, especialmente como uno de los mayores iconos del movimiento antivacunas o en defensa de una política de mano de hierro contra la inmigración, le habían granjeado apoyos entre votantes independientes y de la vena libertaria y contaba también con el reconocimiento nacional de su apellido.
Kennedy tenía además respaldo de algunos grandes donantes que también sostienen la candidatura de Trump y sumó a su candidatura a la millonaria Nicole Shanahan como aspirante a vicepresidente. El respaldo popular y las donaciones, no obstante, fueron erosionándose conforme su campaña iba adquiriendo tintes de escándalos pasados y también estrambóticos, incluyendo sus afirmaciones de que un gusano le comió parte del cerebro. Y su situación se debilitó aún más cuando Biden pasó el testigo a Harris.
El futuro y los argumentos
En una rueda de prensa en Phoenix (Arizona) Kennedy ha explicado que va a retirar su nombre de papeletas en cerca de 10 estados disputados, incluyendo los bisagra clave, pero va a mantenerlo en otros no competitivos.
En sus declaraciones, que se han extendido durante casi 50 minutos, Kennedy ha justificado su respaldo a Trump con argumentos como “la libertad de expresión, la guerra en Ucrania y la guerra contra nuestros niños”. Ha sugerido también que podría haber pactado ya tener un cargo en la potencial segunda Administración del republicano.
Kennedy también ha vuelto a acusar al Partido Demócrata, con quien inició su candidatura antes de reorganizarla como independiente, de haberle frenado con tácticas no democráticas. “En un sistema honesto creo que habría ganado la elección”, ha dicho, acusando también a la formación de haberse “convertido en el partido de la guerra, la censura y la corrupción”.
Rechazo familiar
Según diversas informaciones de la prensa estadounidense, Kennedy contaba con la oposición de su propia esposa, la actriz Cheryl Hines, para respaldar a Trump.
También cinco de sus hermanos le han acusado de “traición a los valores más queridos por nuestro padre y nuestra familia”. Los hermanos, que respaldan a Harris y Tim Walz, siempre se han opuesto a su candidatura y este viernes en un comunicado han definido su decisión de este viernes como “un final triste para una historia triste”.