El sector privado de Estados Unidos «se mantuvo sólido en agosto», como muestran los índices PMI publicados este jueves por S&P Global, que señalan también una creciente «disparidad» entre sectores, con los fabricantes tocando mínimos de ocho meses, tras anotarse una reducción del PMI de 49,6 puntos a 48, y el sector servicios en su mayor nivel desde junio (55,2).

En el sector manufacturero preocupa especialmente la producción, ya que el índice que la mide ha caído hasta los 47,8 puntos en agosto, por debajo de los 50,5 de julio, en lo que supone su nivel más bajo de los últimos 14 meses.

De esta manera, la economía estadounidense en su conjunto mantuvo con ligeros cambios su ritmo sólido, con una caída del PMI compuesto de dos décimas, hasta 54,1 puntos. El organismo que difunde los datos destaca que «aunque el ritmo de expansión se desaceleró ligeramente en agosto, se mantuvo entre los más altos observados en los últimos dos años«.

«Las variaciones sectoriales también se ampliaron en términos de carteras de pedidos. Las entradas de nuevos trabajos aumentaron a un ritmo ligeramente superior en agosto, impulsadas por una mayor demanda de servicios. Los nuevos negocios en el sector servicios mostraron el segundo mayor aumento registrado en los últimos 14 meses. En contraste, los nuevos pedidos a las fábricas cayeron por segundo mes consecutivo, al ritmo más pronunciado desde diciembre», detalla.

En el frente de la inflación, «los precios medios cobrados por bienes y servicios aumentaron a la tasa más lenta desde junio de 2020«, por lo que «la tasa de inflación está ahora sólo marginalmente por encima del promedio registrado en la década anterior a la pandemia».

Chris Williamson, director de negocios de S&P Global Market Intelligence, destaca que «el sólido panorama de crecimiento en agosto apunta a un robusto crecimiento del PIB superior al 2% anualizado en el tercer trimestre, lo que debería ayudar a disipar los temores de una recesión a corto plazo».

«De manera similar, la caída de la inflación de los precios de venta a un nivel cercano al promedio prepandémico señala una ‘normalización’ de la inflación y refuerza los argumentos a favor de tipos de interés más bajos«, concluye.

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