Todavía resuena en la calle Miguel Hernández de Alcalá de Henares el sonido del disparo al aire que tuvo que dar un agente, ante el riesgo vital al que se enfrentó el operativo de la Policía Nacional, desplegado en esta localidad de Madrid, para atajar una pelea muy peligrosa porque sus implicados esgrimían armas blancas y objetos contundentes.
EL ESPAÑOL ha accedido al vídeo que recoge esta reyerta que se atajó tras el estruendo de una bala surcando el cielo de la calle Miguel Hernández, pasados quince minutos de las cinco de la tarde de este martes. «Los vecinos realizaron varias llamadas reclamando presencia policial en la zona», tal y como explica la Policía Nacional.
«Había dos individuos que estaban peleándose: uno de los implicados empuñaba un bate de béisbol y unas tijeras mientras que el otro portaba dos cuchillos«, según detalla la misma fuente policial. «Estaban muy agresivos». Tal conducta se corrobora con el contenido de las imágenes del vídeo que obra en poder de la Jefatura Superior de Policía.
En la zona se movilizaron agentes de paisano de la Policía Judicial y ‘zetas’ con agentes de Seguridad Ciudadana. Cuando llegó el operativo, se encontraron a un hombre de color y a otro de tez blanca, manteniendo una grave disputa. «No se sabe el origen de la pelea, pero uno de ellos presentaba una herida sangrante en la cabeza«.
Los agentes les pidieron que depusieran su actitud y trataron de dialogar con los dos hombres para que soltasen sus armas blancas, sin embargo, uno de los sospechosos se puso todavía más violento. Así lo asegura la Policía Nacional: «No deponía su conducta hostil contra los agentes. Trataron de mediar con él para que se relajase, pero fue a por uno de ellos por lo que un policía realizó un disparo disuasorio al aire porque había una situación de riesgo vital para los integrantes del operativo».
El proyectil surcó el cielo de la barriada, provocando que algunos vecinos comenzasen a chillar pensando que la contienda se había saldado con un muerto. La Policía Nacional confirma que tras el disparo, se procedió a la detención de ambos sospechosos: uno nacido en 1990 y otro en 1983.
«Los dos hombres han sido arrestado por delitos de lesiones y amenazas y se ha abierto una investigación para esclarecer el origen de la disputa». Lo previsible es que también se inicie un proceso interno para corroborar que estaba justificado el disparo disuasorio del agente, con su arma reglamentaria, ya que el protocolo de intervención de la Policía Nacional es muy estricto y establece que solo se debe recurrir a esta medida en situaciones extremas.