Sigue la dirección deportiva del Real Oviedo tratando de encajar todas las piezas del puzle para contar con una plantilla competitiva, y tras alejarse la opción de José Arnaiz, el Oviedo retoma una vieja aspiración del mercado, Ilyas Chaira. La opción de contratar al extremo del Girona es uno de los principales deseos de la dirección deportiva, un interés del que informó LA NUEVA ESPAÑA en exclusiva el pasado 24 de julio. Entonces, el Girona no vio clara la salida, y el futbolista aspiraba a alguna oferta de Primera. Pero tras el paso de los días, la operación se ha acelerado y el Oviedo hace números para ver si tiene encaje en el tope salarial.
El Girona busca salida a Chaira, que tiene un gran cartel en Segunda y muchos pretendientes, pero cuenta el Oviedo con un factor a su favor: el futbolista prefiere jugar de azul a otros destinos en la categoría. El hecho de que el club azul fuera el primero en luchar por su fichaje hace que el futbolista haya optado por esta vía. De concretarse la operación, Chaira llegaría al Oviedo cedido, y el club azul trata de incluir una opción de compra en la operación.
Así las cosas, la única dificultad que queda ahora es el encaje en el tope salarial, aspecto en el que trabaja en estos momentos la entidad para tratar de dar cabida al último movimiento, esa guinda que pedía Calleja para el equipo. En principio, la llegada de Chaira no implicaría necesariamente la salida de ningún futbolista de la plantilla carbayona.
El intento por Chaira se produce después de que el mercado no haya ofrecido muchas opciones para otro futbolista de área. En esa tesitura, la postura de Javi Calleja es la de fichar otro jugador que aunque se emplee en las bandas ayude en la labor anotadora. Ahí es donde se recupera la opción de Chaira, uno de los favoritos de la dirección deportiva desde el comienzo del verano.
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