Berk sigue sin abrir los ojos: por muchos hechos que han dejado ver que su padre no es de fiar, el sigue creyendo que es una buena persona. El joven, lo único que ha querido en todo este tiempo es la felicidad de su padre, mientras que el único objetivo de Gokhan es aprovecharse de la fortuna de su hijo
Ayla ha intentado de mil maneras hacerle ver a Berk la realidad sobre su padre, pero el amor de un hijo muchas veces ciega. Gokhan, por su parte, ha intentado mil veces quitarse a Ayla de en medio y esta vez lo ha conseguido tachándola de ladrona delante de todos y Akif la ha despedido.
Berk ha decidido darle su cuenta del banco y su contraseña a su padre pare que pueda sacar el dinero que quiera, un error que le costará muchos disgustos. Gokhan, ante este gesto, en vez de cambiar y ver que su hijo lo da todo por él, lo único que quiere es sacarle hasta el último céntimo. ¿Cuándo se dará cuenta el joven de la maldad de su padre?