Las enfermeras ya podrán tratar las infecciones de orina no complicadas en mujeres, una de las consultas más comunes en Atención Primaria. Afectan al 50% de las pacientes al menos una vez en su vida, especialmente con el envejecimiento, comorbilidades o institucionalización. «Pues me parece estupendo porque el protocolo es muy latoso. Si vas a urgencias no te atienden rápido porque es una urgencia, pero no tanto, y si vas a un centro de salud y te hacen un cultivo de orina para comprobar que tienes una bacteria, tardan 24 horas como mínimo en darte los resultados», explica a El Periódico de España, de Prensa Ibérica, Ángeles C., que padece habitualmente este tipo de infecciones.
El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este lunes la Resolución de la Dirección General de Salud Pública y Equidad en Salud del Ministerio de Sanidad, por la que se valida la ‘Guía para la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos sujetos a prescripción médica por parte de las/las enfermeras/os para infecciones de tracto urinario inferior no complicada en mujeres adultas’.
Las infecciones del tracto urinario (ITU) abarcan principalmente dos tipos: cistitis, que es la infección de la vejiga o del tracto urinario inferior; y pielonefritis, que es la infección del tracto urinario superior que afecta a los riñones. Son consultas muy habituales en los centros de salud. El microorganismo más común en estas infecciones es Escherichia coli, responsable del 70-80% de los casos.
«Rabias de dolor»
Que las enfermeras puedan tratar esta afección es una iniciativa que aplauden pacientes como Ángeles C. Quienes, como ella, sufren este tipo de dolencias a menudo, consideran que el tiempo que transcurre desde que vas al centro de salud y te hacen un cultivo para comprobar si existe contaminación -tardan un día como mínimo en dar los resultados, insiste- «es demasiado para tratar una infección que es potencialmente peligrosa, porque puede ir creciendo y afectar a los riñones«.
«La única manera de tratar este tipo de infecciones es con antibiótico y siempre revisan el historial para comprobar si tienes resistencia a algún antibiótico o alergias», Ángeles C., paciente
«Aparte de que cuando tienes una infección rabias de dolor y escozor. Yo vivo en Madrid, tengo infecciones de orina recurrentes, por desgracia tengo que acudir al hospital cada dos o tres meses por culpa de esta afección y en cada hospital tienen un protocolo, pero todos pasan por hacer prueba de presencia de bacteria», señala esta paciente.
Tiras reactivas
«La única manera de tratar este tipo de infecciones es con antibiótico y siempre revisan el historial para comprobar si tienes resistencia a algún antibiótico o alergias. En algunos centros ya cuentan con tiras reactivas que detectan la infección en cinco minutos y te recetan el antibiótico que corresponda. No sé por qué eso no lo pueden hacer en enfermería. Sería mucho más rápido, para la enferma y para el propio funcionamiento de las Urgencias y, en cualquier caso, siempre podrán derivarlo al médico que esté de guardia si hay cualquier anomalía… «, añade Ángeles.
Los síntomas típicos de la cistitis incluyen dolor o ardor al orinar o necesidad de orinar con mayor frecuencia de lo normal
Los síntomas típicos de la cistitis incluyen disuria (dolor o ardor al orinar), polaquiuria (necesidad de orinar con mayor frecuencia de lo normal, pero generalmente en pequeñas cantidades), urgencia urinaria, dolor suprapúbico y hematuria (sangre en la orina), sin prurito o flujo vaginal anormal. Se clasifica como ITU complicada cuando afecta a personas con mayor riesgo, como embarazadas, ancianos, diabéticos o personas con anomalías anatómicas, quienes requieren una evaluación médica más profunda.
Aliviar los síntomas
«Un nuevo avance que mejorará y adelantará el tratamiento de la cistitis en aquellas mujeres que lo sufran», ha celebrado este lunes el Consejo General de Enfermería (CGE) ante el nuevo paso dado tras la publicación, en el BOE de la resolución de la Dirección General de Salud Pública.
El tratamiento de la ITU no complicada, que es frecuente en mujeres adultas, se basa en el inicio temprano de medicación con antibiótico, sin necesidad de urocultivo rutinario, recuerda el Ministerio de Sanidad. El objetivo es aliviar los síntomas y erradicar la infección de manera rápida y eficaz, maximizando la accesibilidad al sistema sanitario. La guía ahora publicada «facilita a las enfermeras la indicación y administración de la farmacoterapia adecuada, promoviendo un enfoque integral en Atención Primaria, donde las condiciones son óptimas para su implementación«, se indica.
La guía excluye casos complejos que requieren valoración médica, como infecciones recurrentes, uso de sonda vesical o inmunosupresión
La guía publicada por Sanidad, resultado de un trabajo colaborativo multidisciplinar, ofrece un marco de referencia para que las enfermeras actúen en el tratamiento de mujeres mayores de 14 años con ITU no complicada. Excluye casos complejos que requieren valoración médica, como infecciones recurrentes, uso de sonda vesical o inmunosupresión. Además, establece protocolos específicos para el manejo de medicamentos, definiendo cuándo las enfermeras pueden iniciar, modificar, interrumpir o finalizar un tratamiento en función de los síntomas y evolución del paciente.
Criterios de actuación
Las comunidades autónomas y otras entidades adaptarán esta guía a sus contextos específicos, desarrollando protocolos que concreten la población objetivo, medicamentos autorizados y criterios de actuación. El documento se revisará cada cinco años para incorporar nuevas evidencias científicas y actualizaciones, asegurando que las actuaciones de las enfermeras sean seguras, eficaces y estén alineadas con el uso racional de los medicamentos.
Esta es la novena guía destinada a la indicación de medicamentos por parte de las enfermeras, precisa el departamento que encabeza Mónica García. Ya están publicadas las referentes a deshabituación tabáquica, anestésicos locales, fiebre, anticoagulación oral, tratamiento de heridas, hipertensión, diabetes tipo 1 y tipo 2, quemaduras y ostomías.
EL CGE, que representa a las más de 345.000 enfermeras de España, apunta que, sin embargo, el camino de la regulación de la prescripción enfermera -técnicamente llamada indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso human, «está siendo largo y no exento de obstáculos».