Ser la sombra de Álex Suárez y el escudero de Fabio González. Y solo es el principio. También te podrás convertir en el aliado mágico de Kirian Rodríguez para batir al Madrid de Mbappé en el Estadio de Gran Canaria. Enrique Sánchez y su empresa Orbisnauta se estrenaron en la pasada fan zone. Utlizar la tecnología para recrear un entrenamiento. Una experiencia inmersiva de realidad virtual por cinco euros. «La idea es que los jóvenes, aficionados y abonados de la UD Las Palmas se sienta un jugador más; esto es una experiencia inmersiva de realidad virtual que hemos hecho en Orbisnauta con el club para recrear un entrenamiento. No hay edades, es para gente joven, adulta y todo aquel que esté interesado».
Estás en Barranco Seco, el búnker de la galaxia, y el central de Tamaraceite Álex Suárez te alecciona en el golpeo desde la frontal. «Te enseña a tirar una falta y Fabio González te muestra todos los trucos para lanzar un penalti [en el recreación aparece el exmeta de la UD Ale Gorrín, que ahora pertenece al Mirandés B, y también ofrece trucos para ser un portero diez].
No hay límites. La tecnología inmersiva puede recrear una conversación con Carrión o cómo defender un córner. «Es una experiencia que te hace sentir que estás ahí, como si fuese un protagonista. Es una experiencia subversiva, estás sentado, ergonómico, para que no te dé mareos y con las gafas [que valen 700 euros]». La primera toma de contacto está respondiendo a las expectativas. «Esto es una idea original de Orbisnauta, mi empresa, y se la ofrecimos a la UD.» Se trata de una iniciativa pionera: «En el resto del fútbol no hay iniciativas similares, se usan mucho las fotos e imágenes 360, pero no se ha usado de forma tan original».
En la previa del UD-Sevilla fue el estreno de Enrique Sánchez y su stand, en el que contó con la colaboración de Mar Rodríguez y Raquel Socas. «La idea es crecer con esto y en un futuro crear más contenido. El secreto es acercar al ídolo, la estrella y ponerla delante del aficionado. Se trata de aprovechar un nuevo medio». ¿Contempla un producto de experiencia inmersiva en el despacho de Miguel Ángel Ramírz? ¿Y en el de Luis Helguera para cerrar fichajes? «El atractivo está en el deportivo, conocer al jugador, lo que dice, cómo se expresa…Poder sentarte con Kirian, el capitán, y escuchar como se siente al meter un gol».
Las gafas de realidad virtual valen 700 euros, pero «lo costoso es el contenido, que lo puedes grabar con una empresa especializada en experiencias inmersivas. Nosotros manejamos el concepto, el guion, el story-board, hasta lo que es la implementación, desarrollo y la instalación final. El objetivo es crear contenidos nuevos y cambiarlos cada semana. No solo mostrarlos en la Fan Zone sino incluso en Centro Comerciales, así como en otros lugares para su promoción como los colegios».
Tener taquilla propia y ver lo prohibido
Insiste Enrique Sánchez que ahora manda la imaginación. Con un buen guion, puedes introducirte en el vestuario, un lugar sagrado, y poder escuchar a McBurnie. «Básicamente, se trata de conocer la UD y a sus estrellas de una forma inmersiva y nueva». No tiene nada que ver con la experiencia de realidad virtual del Gran Canaria en el Tour. «Esto se aleja un poco de conocer infraestructuras y se centra en el lado más personal del jugador. Tener al jugador delante, cerca, justo en tu cara y conocerlo mejor».
La infraestructura de la empresa de Enrique Sánchez para este tipo de iniciativas permite ampliar el producto. Ir más allá. La maquinaria de los sueños. «Luego si quieres algo más personalizado, figuración, modelado, animación o banda sonora se puede hacer, auqnue puede subir el precio». Cada proyecto inmersivo tiene un coste de 7.000 a 15.000 euros. Dentro del universo UD, ya tiene en mente poner a disposición de los abonados y aficionados más inquietudes. Entrar en el vestuario, conversar con Kirian, pasear por la playa de Las Canteras con Enzo Loiodice, conocer los secretos de un pase prefecto con Javi Muñoz en el Gran Canaria…Tome asiento y póngase las gafas. El objetivo es convertirse en un soldado carry on.