Un vecino de Guarrate ha resultado herido este sábado en el encierro mixto de San Roquito celebrado en Venialbo con motivo de las fiestas patronales. El incidente se produjo cuando el aficionado intentó recortar a uno de los astados, que le enganchó por el pantalón provocando que cayera al suelo y que fuera revolcado.
De inmediato, caballistas y otros aficionados se aproximaron al lugar en el que tuvo lugar el incidente para intentar separar al toro. El vecino de Guarrate fue atendido en el quirófano móvil por los profesionales sanitarios desplazados hasta Venialbo, aunque finalmente se decidió su traslado en ambulancia al Hospital Virgen de la Concha de Zamora.
Por el momento se desconoce el alcance de la cogida y el estado del herido, aunque testigos presenciales han asegurado que el joven sangraba por una pierna, pero que permanecía consciente cuando accedió al quirófano móvil.
El incidente provocó que los caballistas arrinconaran a los astados en una zona de la pradera del Arradal para dar tiempo a la ambulancia que trasladó al herido a regresar al pueblo y poder retomar el festejo con los medios sanitarios necesarios para garantizar la asistencia de los aficionados por si se registraba otro percance.
Cerca de una hora estuvo paralizado el encierro mixto que ya se ha retomado, con gran afluencia de caballistas y de aficionados de Venialbo y de otros puntos de la provincia.
Además, los cuatro toros, de las ganaderías de Rodolfo Gallego, Paloma Sánchez Río, Los Bayones y Miranda de Pericalvo, ofrecieron un buen juego y contribuyeron a engrandecer uno de los encierros más importantes de cuantos se celebran en la provincia.