La emblemática sala Malatesta de Santiago lleva cerrada desde marzo. El Concello tomó la decisión de clausurarla tras comprobar un exceso de decibelios en una medición realizada en una vivienda cercana.
Desde hacía tiempo los residentes de la zona protestaban por sufrir altos niveles de ruido en sus casas. Los vecinos vuelven ahora a estar preocupados. En varias plataformas de venta de entradas ya se pueden adquirir tickets para conciertos en el establecimiento a partir de septiembre.
Raxoi indica que la sala no podrá reabrir hasta que se realicen las mejoras del aislamiento acústico que han sido requeridas a los propietarios. Tras la clausura del local, la Malatesta remitió al Ayuntamiento sus alegaciones al expediente de cierre. A finales de abril, los propietarios de la sala censuraban en sus redes sociales la tardanza en la respuesta del Pazo de Raxoi. En la publicación cargaron contra la “inoperancia” del Ayuntamiento y su “interés por agotarnos ecónomica y moralmente” y recordaron que en la sala trabajan 11 personas.
El Concello asegura que en estos momentos ya se ha dado respuesta a las alegaciones y que han exigido al establecimiento que realice “las actuaciones necesarias para incrementar el aislamiento sonoro de la sala”. Una vez se acometan las mejoras requeridas y se certifiquen las actuaciones se analizará la posible apertura de la sala de conciertos.
Aunque de momento en el Pazo de Raxoi no hay constancia de que los trabajos de insonorización hayan sido realizados ya hay entradas a la venta para conciertos en el local.
La banda madrileña-alicantina Niña Polaca, del sello Subterfuge Records, tiene programada la primera actuación para el próximo 28 de septiembre y los tickets pueden adquirirse a través de la plataforma Ataquilla. La firma Vibra Mahou también ha anunciado que el grupo pop rock Shinova ofrecerá un concierto en Santiago en el escenario de la Malatesta el viernes 1 de noviembre.
EL CORREO GALLEGO ha intentado sin éxito contactar con los propietarios de la sala para conocer si ya se están ejecutando los trabajos de insonorización requeridos por el Ayuntamiento y tienen previsto finalizarse antes de las actuaciones anunciadas.
Malestar vecinal
La posible reapertura de la sala ha causado malestar en el barrio de San Lourenzo. La Asociación de Vecinos Sarela muestra su “profunda” preocupación. “Somos parte del expediente administrativo y la sala tenía incumplimientos muy graves de la licencia”, subrayan fuentes de la asociación vecinal. Apuntan que la empresa no cumplía con los requisitos de insonorización y que hasta que no protestaron “no se comprobó que no era cierto”.
La asociación demanda al Concello de Santiago que verifique antes de permitir la reapertura que el aislamiento acústico se ha realizado de manera correcta y que no se fíen de los documentos que presente la empresa. Además de los problemas de ruido, los vecinos aseguran que la salida de emergencia de la sala tampoco cumple la normativa.
Cuando se cerró la sala en marzo, el propietario de la sala aseguró en declaraciones a EL CORREO GALLEGO que se trataba de una medida ilegal. “Pecharon a sala sen contemplación, ás once da noite e sen pensar nas 11 persoas que traballan aquí”, criticó, antes de apuntar que la orden de cierre llegó después de una medición en un edificio situado “pola parte de atrás” de la sala de conciertos, y en la que se habría detectado un exceso de volumen “dun punto por riba do que tería que salir”.
El dueño mostraba su sorpresa ante una medida tan drástica por parte del Concello “cando é a primeira vez que se detecta un fallo deste tipo”. Al respecto, apuntó que la propia sala había realizado hasta tres mediciones con empresas especializadas desde 2015 hasta el momento y todas obtuvieron buen resultado. Resignado ante lo sucedido, el propietario de la Malatesta sostenía que “esta é a sala de Galicia que máis veces se intentou pechar”.
En aquel momento, el concelleiro de Urbanismo, Iago Lestegás, justificó la decisión de decretar el cierre. Lestegás apuntó que las mediciones de ruido, “determinaron que se superan os niveis permitidos tanto no interior de domicilios como no ambiente exterior”. De esta manera, prosiguió, “o que procede, porque é obrigatorio, é suspender a actividade ata que se corrixan as deficiencias que poidan estar causando esta situación”.
Suspensión de actividad
La Malatesta ya había recibido la orden de suspender su actividad por parte del Concello en octubre de 2023. Raxoi decretó la medida tras la inspección realizada por los técnicos de Urbanismo a raíz del conato de incendio que se declaró en el interior del local de ocio nocturno.
Los técnicos habían detectado algunas deficiencias en las instalaciones, provocadas principalmente por el suceso, que se deberán subsanar. Lo cierto es que la propia sala ya había anunciado después del incendio que se saldó con daños materiales, que permanecería sin actividad durante algún tiempo hasta reparar los desperfectos provocados por el fuego, que afectó a la instalación eléctrica.
Las llamas se originaron en una fuente de alimentación de una línea de focos led y se extendió por esta instalación. La sala tuvo que ser desalojada de madrugada, pero no hubo que lamentar heridos ni daños de consideración.