‘TardeAR’ ha protagonizado un vergonzoso momento en directo. El programa presentado por Beatriz Archidona se desplazó hasta Estepona para abordar un trágico suceso ocurrido en la localidad. Hace varios días, un ciudadano belga fue asesinado de un disparo en la espalda mientras se celebraba una macrofiesta ilegal en una lujosa mansión de la ciudad malagueña.
El magacín vespertino entrevistó a Samara, una de las encargadas de la fiesta y conocedora del presunto autor del crimen, con el que habría mantenido una relación desde hace unas semanas. «No tengo pareja, soy un alma libre. Yo estaba liándome con él, pero ya está», replicaba la joven.
Samara dejó muy sorprendidos a los colaboradores de ‘TardeAR’ por las respuestas a algunas de las preguntas que Beatriz Archidona formulaba. Al ser preguntada por la existencia del arma blanca, la joven aseguró que «nadie sabe lo que yo llevo en el bolso».
En ese momento, Samara compartió con los espectadores cómo vivió lo sucedido aquella noche: «Yo estaba en la escalera con un grupo de amigos y todo el mundo lo que hizo fue correr para la piscina. Los cabrones me empujaron y me dejaron atrás, en plan ‘estos maricones me dejaron la última’. Yo, si hubiese sido un tío, hubiese ayudado a la mujer a subir, pero corrieron todos como unos maricones. Pero no pasa nada, eso es en el momento. Allá ellos con su karma», asegura.
El mensaje homófobo de su explicación no fue criticado por parte del programa, sin embargo, a la hora de explicar el dinero a pagar por participar en la macrofiesta, la tensión comenzó a escalar. «Esto es como una iglesia, ponemos una hucha y el que quiera poner dinero que lo ponga», asegura en tono humorístico. «Bueno, poner dinero… Estamos hablando de fiestas clandestinas, Samara, a mí tampoco me hace tanta gracia porque justo en esa casa ha fallecido una persona”, señaló Archidona.