La Guardia Civil ha detenido en las inmediaciones de Santiago de Compostela a los miembros de un grupo criminal que se dedicaba al robo con fuerzas de pisos habitados. Tres personas de entre 33 y 35 años, de un país del Cáucaso, integran este grupo, que está considerado responsable de numerosos delitos de robo en pisos.
La investigación comenzó tras el análisis detallado de robos en viviendas de la provincia de A Coruña hasta lograr detenerlos en las inmediaciones de Compostela después de confirmar un patrón repetitivo: campañas delictivas durante períodos en los que las viviendas suelen estar desocupadas.
Los miembros del grupo utilizaban técnicas avanzadas de ganzuado y bumping -apertura de cerraduras sin la llave- para acceder a las viviendas. Tenían un sofisticado método para localizar viviendas vacías, ya que de madrugada colocaban marcas con hilos de silicona o pegamento en la zona baja de las puertas y regresaban días después para comprobar si las marcas seguían intactas y verificar la ausencia de moradores.
Los ladrones aprovechaban la ausencia de los propietarios en las vacaciones estivales para perpetrar un considerable número de robos y dejaban el menor rastro posible.
Por el momento se les vincula directamente con la comisión de hasta 11 robos en interiores de viviendas en las localidades de Fene (A Coruña) y Ourense, pero el ‘modus operandi’ del grupo es similar al que denunciaron vecinos de Fontiñas a mediados de julio, cuando una nota anónima pegada en uno de los portales del barrio alertaba sobre intentos de robo en domicilios vacíos porque sus dueños se habían ido de vacaciones. «Estos días de fin de semana han estado marcando las puertas de las viviendas con una especie de hilo de pegamento que unen al marco superior con el objetivo de robar», rezaba la nota, que explicaba que estas marcas pueden confundirse con un «hilo de tela de araña», por lo que pedía extremar las precauciones y alertar a la Policía en caso de encontrarse a alguien ajeno al portal en su interior.
Unas semanas después de lo sucedido en Fontiñas, una nota colocada el centro sociocultural de Pontepedriña por la asociación de vecinos del barrio advertía de una ola de robos en domicilios. La nota buscaba prevenir a los vecinos de los robos en viviendas que se producen en el barrio y alrededores desde el pasado mes de junio. «(Los ladrones) deben de ser expertos porque entran en las casas sin romper las cerraduras. Buscan dinero y joyas pero no dejan las viviendas desordenadas. Cuando los perjudicados se dan cuenta del robo pueden haber pasado días», explicaron entonces a EL CORREO GALLEGO miembros de la citada asociación. Tienen constancia de al menos cinco robos en viviendas entre los últimos días de junio y los primeros compases de julio
Agentes heridos en la detención
El seguimiento constante de los investigados reveló que planeaban nuevos robos, por lo que se coordinó un operativo para su detención. Este viernes fueron interceptados en la vía pública y uno de ellos opuso gran resistencia. De hecho, varios agentes resultaron heridos con lesiones leves.
En los registros posteriores, se recuperaron diversos efectos sustraídos de gran valor, como relojes de alta gama, pendientes y joyas, principalmente de oro. Además, se encontraron múltiples herramientas utilizadas para manipular y abrir cerraduras.