Al menos cinco personas murieron y otras tres resultaron heridas tras un tiroteo entre grupos de delincuentes armados en la zona minera de Camilo Ponce Enríquez, en la provincia de Azuay, según informó este martes la Policía de Ecuador.
La entidad del orden, en un mensaje por redes sociales, precisó que emprendió las investigaciones para esclarecer las causas de este suceso y dar con los responsables de los asesinatos. «Esta mañana se habría registrado un ataque entre integrantes de grupos armados organizados que causó el deceso de 5 personas y 3 heridos, en una mina del cantón (municipio) Camilo Ponce Enríquez, Azuay», precisó la fuerza del orden en su cuenta de la red X.
Ese municipio se ubica en una zona montañosa y del bosque húmedo tropical en las estribaciones de la cordillera andina del sur del país que se adentra hacia la región costera.
La Policía reiteró que en coordinación con el llamado ‘Bloque de Búsqueda’, una instancia creada por el Gobierno y constituida por policías y militares para combatir a la delincuencia, realizarán las «investigaciones para esclarecer las causas y capturar a los responsables de este hecho».
El auge del crimen organizado en Ecuador convirtió a este país sudamericano en el más violento de la región en 2023, cuando alcanzó una tasa de 47,2 asesinatos por cada 100.000 habitantes, según las autoridades que atribuyen esa extrema violencia a grupos de delincuencia organizada dedicados especialmente al narcotráfico, aunque también a la minería ilegal.
Ante la galopante crisis de inseguridad desatada a inicios de este año, el presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, elevó la lucha contra el crimen organizado a la categoría de «conflicto armado interno», con lo que pasó a catalogar a estas bandas como «terroristas» y «actores beligerantes no estatales». También a comienzos de 2024 decretó un estado de excepción con el que militarizó las cárceles, consideradas también foco de la violencia armada en el país.
De acuerdo al Gobierno, esas medidas han permitido bajar en un 17% el índice de muertes violentas en lo que va de 2024, respecto al año anterior, aunque siguen siendo recurrentes los episodios de violencia criminal extrema, y no han cesado otro tipo de delitos como secuestros y extorsiones.