Aun consciente de que la empresa es prácticamente imposible, el Getafe tiene decidido volver a la carga por Adrián Liso. La insistencia de José Bordalás, técnico azulón, en forzar al máximo y apurar cualquier mínima opción de hacerse con los servicios del extremo aragonés obliga a la entidad presidida por Ángel Torres a no arrojar la toalla sin acometer un nuevo intento y, de hecho, en las próximas horas (en principio, hoy mismo) llegará a las oficinas del Real Zaragoza una nueva oferta por el futbolista que superaría los 3 millones de euros por la mitad de su pase que llegó hace unos días a la mesa de la SAD.
Pero el Zaragoza ya ha tomado una decisión y así se lo hizo saber la pasada semana al Getafe. La propiedad dio orden de no negociar y, previa consulta a Víctor Fernández, declaró intransferible a Liso, por lo que su salida solo sería posible si un equipo interesado en su fichaje desembolsa los 15 millones de euros de su cláusula de rescisión (o cantidad aproximada) y, además, el jugador quiere salir. De momento, ninguna de las dos cosas se cumple, por lo que Liso, a pesar de la obstinación de Bordalás, seguirá en el Zaragoza.
Fue Víctor, pues, el que trasladó a la propiedad que Liso es un pilar básico del proyecto de ascenso. Al técnico le avala su apuesta personal por un futbolista del que ya le habían hablado muy bien antes de hacerse, en marzo, con las riendas del equipo, pero del que quedó prendado cuando lo vio en el primer entrenamiento. “¿Pero de dónde ha salido ese tío?”, admitió posteriormente haber preguntado el entrenador zaragocista cuando observó las prestaciones del extremo. Con él, Liso jugó todos los partidos (12), la gran mayoría formando parte del once inicial y anotó dos goles claves en la salvación del equipo.
A sus 19 años, el canterano se había convertido en pieza maestra y en un futbolista clave para el técnico, que, por ello, dejó claro a la propiedad que su valor futuro será mucho mayor que lo que ahora ofrece el Getafe y que su presencia en el flanco izquierdo del ataque zaragocista es esencial en las aspiraciones de ascenso. No en vano, Víctor considera a Liso uno de los mejores futbolistas de la categoría y sostiene que el potencial del Zaragoza se vería notablemente reducido con su pérdida. Un caso similar al acaecido en 2018 con James Igbekeme, al que Víctor se negó a vender al Granada por 3 millones de euros por el 60% del pase después de que el club ya hubiese traspasado a Pep Biel al Copenhague por 5 millones. Pero, en este caso, el técnico lo tiene aún más claro. La edad del jugador, el hecho de que sea un jugador de la tierra y su colosal crecimiento le convierten en indiscutible.
Se trata, en definitiva, de un pulso entre entrenadores. Bordalás comparte con Víctor la opinión sobre el futbolista, que encaja a la perfección en lo que pretende para reforzar el extremo zurdo del Getafe. Por eso, el alicantino pide a su club que vuelva a intentarlo, algo que ya preveía el Zaragoza, que recientemente blindó al jugador con una renovación hasta 2029 y esa cláusula de rescisión de 15 millones de euros a la que ahora se remite.
Pero el Getafe no es el único equipo de Primera interesado en el futbolista, aunque sí el primero que se ha decidido a presentar oferta. Al interés, desde hace tiempo, de Real Madrid y Barcelona se ha unido en las últimas semanas el de varios clubs más de la máxima categoría nacional que han preguntado por la situación del atacante. Pero la decisión del Zaragoza de remitirse a su cláusula ahuyenta a la gran mayoría.