«[Carles] Puigdemont ha regresado a casa, al lado del Parlament, donde debería estar ahora. Bienvenido«, ha arrancado en el atril del Parlament, Josep Maria Jové. El republicano, en una sesión compleja después de Junts sugiera que la posible detención del expresident será responsabilidad de Esquerra por haber pactado con el PSC la investidura de Salvador Illa, Jové ha cargado con dureza contra los jueces por no aplicar la amnistía en su caso.
El portavoz republicano se ha remitido a la consulta interna para justificar su apoyo a Illa, y ha lanzado varias advertencias a los socialistas, a quienes ha pedido que cumplan el acuerdo porque la desconfianza pesa, como ha pesado en el resultado de la votación interna y en posicionamiento de Jovent Republicà. «Tenemos memoria y motivos para desconfiar […] No nos temblará el pulso» para dejarle caer, ha advertido.
En la misma dirección ha sacado pecho del acuerdo alcanzado con el PSC, especialmente en el flanco económico, reivindicando el concierto económico como el «salto en soberanía» más importante de las últimas cuatro décadas. «Hoy no tiene mayoría para pasar página, sino para encontrar una solución al conflicto político. Solo tiene mayoría para aplicar y cumplir el acuerdo. Téngalo muy presente», ha añadido.
Tras deshacerse en elogios con el Govern de ERC en minoría, ha defendido el legado de Pere Aragonès como president. «Hemos persistido y el trabajo de este Consell Executiu ha sido ejemplar. Y su tarea quedará reconocida tarde o temprano», ha deslizado.
Jové ha reconocido que lo que ha generado más debate en las filas republicanas es que hoy no se invista a un independentista. Pero, a la vez, ha llamado a asumir el resultado de las urnas, sin que eso implique aparcar la hoja de ruta soberanista. «Antes, el independentismo sumaba», ha recalcado, tras la pérdida de una mayoría parlamentaria tras las elecciones del 12 de mayo, y tras haber precipitado el fin de la legislatura al no haber recabado el apoyo de los Comuns a los presupuestos tras la salida de Junts del Govern.
El diputado ha hurgado en los pactos entre el PSC y Junts en el Parlament para justificar el suyo, y no ha escatimado críticas a la posconvergencia. «Las urnas no nos dieron la fuerza para gobernar, ni el liderazgo que estampaban en carteles electorales y hemos tenido que ser nosotros los que hemos puesto esfuerzos para desbloquear la situación», ha añadido.
«Estamos donde estábamos, trabajando por la independencia de Cataluña y una sociedad más justa», ha rematado, y ha llamado a recuperar la unión del independentismo a través de un referéndum. «Hay que frenar la dinámica destructiva. Es el momento de rehacernos, es el momento del referéndum».
