Un 40% de los estudiantes que pasarán el próximo curso fuera de sus poblaciones de origen, pero también profesionales extranjeros o los denominados nómadas digitales, habían alquilado a finales de julio sus alojamientos de cara al próximo año, sin esperar al mes de septiembre que es cuando se reanuda la actividad académica y laboral. En agosto el número de contratos de alquiler de este tipo suele desacelerarse por las vacaciones.
Las plataformas especializadas en este tipo de arrendamientos de temporada han detectado que las operaciones se cierran cada vez más temprano y más rápido, con un 35% de propiedades ya alquiladas al cierre de julio en Barcelona, un 38% en València y un 30% en Madrid. «De cara a las últimas semanas de verano o primeros de septiembre, la oferta de viviendas y habitaciones disponible se reduce considerablemente», subraya Eduardo Garbayo, director de operaciones de Spotahome, un portal dedicado al alquiler digital de habitaciones y apartamentos a medio y largo plazo.
«Recomendamos, por lo tanto, no esperar hasta el último momento a fin de evitar sorpresas desagradables, como subidas de precio a última hora, y garantizar el alojamiento en la ciudad de destino, así como evitar potenciales estafas de personas que se aprovechan de la alta demanda», agrega Garbayo, que aconseja la reserva ‘online’ con antelación a través de plataformas de confianza, sobre todo para aquellos que vayan fuera de España, como los estudiantes de Erasmus.
«Es clave para no vivir situaciones que se repiten cada año y que dejan muchos afectados al comienzo del curso escolar en todas las ciudades europeas», indica. Italia lideraba a finales de julio el ránking de alojamientos ya alquilados, sobre todo en Roma (50%) y Milán (37%). Le siguen ciudades muy populares entre estudiantes y trabajadores itinerantes como Bruselas (52%), Lisboa (40%), Dublín (47%) y Berlín (37%).
Según la información de Spotahome, el 85% de las personas que buscan este tipo de viviendas son jóvenes menores de 35 años, que se desplazan desde otra ciudad y realizan una estancia media en el alojamiento de seis meses.
Una habitación por 400 euros de media
Mientras tanto, la oferta de pisos compartidos se incrementó un 43% interanual durante el primer trimestre de este 2024, lo que provocó que el precio se contuviera y aumentara un 3%, hasta los 400 euros mensuales de media en el conjunto de España, según un informe publicado recientemente por el portal Idealista. Barcelona es, según el mismo análisis, la ciudad con los alquileres de habitaciones más caros, a 550 euros mensuales de promedio. Le siguen Madrid (525 euros), Palma (440 euros) y San Sebastián (410 euros).
Entre las ciudades que más interés han despertado a la hora de alquilar habitaciones a medio o largo plazo destaca Bilbao, donde este mercado ha crecido este año un 41%. Algo más moderado ha sido el incremento en Madrid (31%), en San Sebastián (13%) y en Palma (2%). La cifra se ha reducido en Alicante (-39%), Valencia (-31%), Barcelona (-29%), Sevilla (-22%) y Málaga (-8%).