Hasta la fecha, tan sólo Vox se atrevía a identificar sin tapujos a Salvador Illa como un líder del independentismo catalán. En los prolegómenos de la cita electoral del 12 de mayo, el candidato ultraderechista a la Generalitat, Ignacio Garriga, advertía que no destinarían sus votos en ningún caso a facilitar la investidura del exministro socialista, a quien calificaban como un “independentista camuflado”. Cuatro meses después, la formación que dirige Santiago Abascal ya no está sola en este marco argumental. El Partido Popular, a las puertas del debate de investidura, no sólo ha abrazado este razonamiento, sino que han señalado al dirigente del PSC como un futuro president “más independentista” que Carles Puigdemont o Quim Torra.
La portavoz popular en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, desfilaba por la sala de prensa del cuartel general de los conservadores en el corazón de Madrid para repasar la actualidad de esta primera semana completa de agosto, marcada por la investidura de Salvador Illa. El socialista, tras el acuerdo rubricado con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), cuenta con los votos necesarios para resultar investido, previsiblemente tras el debate que se iniciará el jueves y concluirá el viernes con su coronación. Al menos, están garantizados todos menos uno, el de la diputada de las juventudes republicanas, que celebran en la tarde de este lunes un cónclave para fijar postura sobre la unción del candidato del PSC.
En el PP dan prácticamente por sentado que Illa será el nuevo president de la Generalitat el próximo viernes, toda vez que cristalice el apoyo amarrado con los republicanos a través del acuerdo para reformular el sistema fiscal catalán, entre otras cuestiones. Montserrat así lo escenificaba ante los periodistas este mismo lunes, señalando al exministro de Sanidad como el presidente “con la agenda más independentista” de todos los jefes del Ejecutivo catalán de la historia de la democracia.
Giro a la derecha
Intervención contundente que supone un volantazo a la derecha para los conservadores, que nunca habían llegado tan lejos. El paradigma escogido por Montserrat constata el abrazo de los populares al argumentario ya clásico de la ultraderecha de Vox en Cataluña, que siempre se ha referido al candidato del PSC como un resorte del soberanismo catalán. Hasta la fecha, el Partido Popular se había limitado a referirse a su adversario como un cooperador necesario del independentismo, pero nunca se le había cargado con tal etiqueta.
Aun con todo, Montserrat lo ha hecho efectivo, argumentando que Cataluña “seguirá teniendo un presidente independentista” en caso de que Illa consiga la confianza del Parlament este próximo viernes. Así, la europarlamentaria conservadora ha alertado de que la “independencia fiscal” de la región constatará la “creación de un aparato de Estado catalán” que “no” se orientará hacia la “mejora de los servicios públicos”.
En este contexto, la portavoz conservadora en Bruselas ha acusado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de haber cedido ante el independentismo para generar un “concierto económico” en Cataluña destinado a “comprar tres cosas”: “La legitimación plena del procés, la creación de las condiciones para reiniciarlo con más ventajas, recursos y privilegios, y el tercero, más tiempo y poder para permanecer en la Moncloa”. Por ello, ha rechazado la argumentación del PSC, que señalaban que la “financiación singular” catalana es “buena para España”. Sin embargo, para Montserrat -y el resto de la cúpula del PP- no es sino un “paso previo” al referéndum de autodeterminación, que a la postre es la reivindicación histórica del tándem separatista. “Es independencia fiscal para mantener el negocio corrupto del procés. Illa asume como propia su agenda”, lamentaba.
El regreso de Puigdemont
El expresident de la Generalitat copa una parte alícuota de los titulares del día. Su regreso cobra cada vez más fuerza, aunque no hay resorte alguno que lo confirme. Puigdemont guarda con recelo sus planes más inmediatos, confiándoselos tan sólo a un reducido grupo de su núcleo más afín. Sobre ello también ha reflexionado la portavoz popular, quien defendía que el único camino para “un prófugo” es presentarse ante la Justicia.
“Puigdemont tiene a Sánchez atrapado en un bloque gubernamental en el que nada puede aprobar sin él. Pero aquí ha sido Sánchez quien ha elegido ser rehén del prófugo y también de ERC y Bildu”, ha indicado la dirigente del Partido Popular, quien considera que la legislatura de Illa, independientemente del “numerito” del expresident de la Generalitat, nace “débil” porque dependerá de su “sumisión ante Esquerra”.
Por ello, interrogada sobre si el PP valora una abstención en la investidura para sacar al PSC de la trampa independentista en la que le sitúan los conservadores, Montserrat ha mantenido el enroque. “No vamos a engañar a nuestros votantes. No aceptamos chantaje de nadie y a nosotros nos han votado para liderar el constitucionalismo en Cataluña. Somos un partido previsible”, ha argumentado la portavoz conservadora en el Parlamento Europeo, quien ha deslizado que la dirección nacional de su partido está valorando todas las vías judiciales y legislativas a su alcance para impedir el concierto catalán.
