El abogado Gonzalo Boye ha confirmado este domingo que uno de los objetivos que persigue Carles Puigdemont al regresar a España, para asistir al debate de investidura en el Parlament, es intentar que ERC reconsidere su apoyo al candidato socialista Salvador Illa.
El objetivo del regreso de Puigdemont, ha indicado su abogado en una entrevista a RNE, es participar en el debate de investidura en representación de Junts, dar respuesta al discurso de Illa y mostrar a ERC «en brazos de quién se está lanzando«.
Ya en su carta pública difundida el sábado, Puigdemont reprochaba a ERC que entregue la Presidencia de la Generalitat a un candidato «españolista» que no va a proteger la lengua catalana ni tendrá margen para negociar «la resolución del conflicto histórico«.
Pero además, señalaba que al cerrar su pacto de investidura con el PSC, ERC acerca el momento de su detención, que se producirá previsiblemente en cuanto el prófugo de la Justicia pise suelo español o intente acceder al Parlament.
Al respecto, Gonzalo Boye ha afirmado este domingo que, con su carta pública, Puigdemont ha querido explicar a los catalanes «por qué regresa, y por culpa de quién«, ha dicho en alusión a ERC.
Boye no ha querido adelantar cuál será su estrategia de defensa si Puigdemont es detenido, para no «dar ventaja a quien se está saltando la ley«, ha dicho en alusión a los magistrados del Tribunal Supremo que han considerado que la amnistía no es aplicable al expresidente de la Generalitat.
«Estamos preparados para los distintos escenarios«, se ha limitado a indicar el letrado al respecto.
Preguntado si no hubiera sido conveniente que Puigdemont esperara a que el Constitucional resuelva los recursos a la ley de amnistía, antes de regresar a España, Boye ha aclarado: «Como abogado, me corresponde exponer las situaciones e implementar los métodos que consideramos oportunos para defenderle», ha dicho.
Pero, ha recordado, Puigdemont es «un político que toma decisiones políticas». Y se dispone a cumplir la promesa que realizó de regresar a Cataluña para asistir al debate de investidura. «El abogado del expresidente de la Generalitat puede hacer su trabajo jurídico», ha añadido Boye, «pero no decirle lo que debe hacer«.
Gonzalo Boye ha expresado su sospecha, por otro lado, de que PSC y ERC han acelerado el pacto de investidura de Salvador Illa para que se produzca en pleno mes de agosto, con la mayoría de los catalanes de vacaciones, para evitar que se echen a la calle a expresar su apoyo de Puigdemont.
Aunque lo cierto es que, si ningún candidato es investido antes del 25 de agosto, se disolverá el Parlament automáticamente para convocar nuevas elecciones, que se celebrarían el próximo mes de octubre. Este era el escenario favorito que acariciaba Puigdemont, convencido que ERC sufrirá un descalabro aún más profundo si se repiten los comicios.
Los jóvenes de ERC
El líder del PSC, Salvador Illa, comunicó el sábado al presidente del Parlament, Josep Rull, que ya tiene el apoyo necesario de 68 diputados para ser investido presidente de la Generalitat, tras cerrar los acuerdos con ERC (que quedará fuera de su Ejecutivo) y los Comunes.
Rull tenía previsto iniciar el lunes la ronda de contactos con los grupos políticos, para constatar los apoyos de Illa y fijar la fecha del debate de investidura. No obstante, la Cámara ha comunicado que este trámite ha quedado aplazado hasta el martes por problemas de «agenda» de ERC.
Y es que, aunque las bases de ERC han respaldado el pacto de investidura de Illa por una ajustada mayoría del 53,5%, todavía está en el aire el sentido del voto de su diputada Mar Besses, que se incorporó a la candidatura en presentación de las Juventudes del partido.
El Consell Nacional del Jovent Republicà (las juventudes de ERC) se reúne el lunes por la tarde, para debatir y resolver si su diputada Besses debe apoyar la investidura de Illa.