¡Qué final! El Stade de France rugió para coronar al ugandés Joshua Cheptegei como nuevo campeón olímpico de 10.000 metros con 26:43.13 (nuevo récord olímpico), sucediendo a un Selemon Barega que le ganó en Tokio 2021 por 41 centésimas y sumando su segundo cetro tras el que logró en 5.000 en la capital nipona, seguido por el etíope Berihu Aregawi (26:43.44) y por otro enorme atleta, el estadounidense Grant Fisher (26:43.46).
La otra estrella de la prueba fue un pequeño atleta nacido en Burundi y nacionalizado español que volvió a hacer honor a su camiseta con una actuación excepcional para demostrar que es casi mejor atleta que persona. Este tipo tan extraordinario murió en la pista para pelear por una plaza de finalista que se le escapó por un puesto.
Para que se hagan una idea, Thierry Ndikumwenayo llegaba con 27:26.57 como mejor marca personal y el récord de España lo poseía el madrileño Tomás Roncero desde 1998 con 27:14.44. Pues bien, este viernes ha parado el crono en unos asombrosos 26:49.49 que le sirven para ser el más rápido de la historia en España y el segundo europeo tras el británico de origen somalí Mo Farah (26:46.47).
Las dos españolas que participaban en las series de 800 metros no tuvieron opciones de acceder directamente a las semifinales y buscarán ese objetivo este sábado en ese invento con gaseosa de la repesca que tan solo puede salir del Consejo de World Athletics y del presidente del organismo Sebastian Coe.
El billete directo era tan solo para las tres primeras y Lorea Ibarzabal fue séptima con 2:00.71, misma posición que la también madrileña Lorena Martín en la segunda (2:02.52). Sí están ya en ‘semis’ la gran favorita británica Keely Hodkingson (1:59.31) y su gran rival sobre el papel, la keniana Mary Moraa (1:57.95).
La medallista europea de bronce Marta García peleó hasta el último 200 en unas exigentes semifinales de 5.000 metros en las que pasaban las ocho primeras y acabó décima en la primera con 15:18.08. Con enorme autoridad, la bicampeona mundial keniana Faith Kipyegon (14:57.66).
La gran sorpresa se mascó en un Stade de France que vibró de manera espectacular con el oro de Leon Marchand en 200 estilos (se aplazó la salida de una serie de 400 del decatlón) estuvo a punto de llegar en el peso, ya que el italiano Leo Fabbri estaba fuera de la final tras las dos primeras rondas. En la tercera se fue a 21,76, mejor marca tras los 21,61 del checo Stanek y los 21,49 del otro favorito estadounidense Ryan Crouser.
Por último, Jorge Ureña terminó la primera jornada de decatlón en decimoctava posición con unos discretos 4.102 puntos mientras por delante se aventura un gran duelo entre el emergente alemán Neugengaber (4.650), el boricua Owens-Delerme (4.608), el noruego Skotheim (4.588) y el vigente campeón canadiense Damian Warner (4.561).
Antes, Ana Peleteiro había logrado la clasificación para la final de triple salto con una marca de 13,36 que consiguió a la primera, un centímetro más que la marca requerida por la organización. Por la mañana, Adel Mechaal, Mario García y Nacho Fontes no habían logrado la clasificación para las semifinales de 1.500, aunque tendrán otra oportunidad este sábado.