Doscientas personas, buena parte de ellas residentes en diferentes países de América, participaron ayer en el VI Encuentro Hispanoamericano, la cita que ya se ha convertido en cita habitual de los primeros días del mes de agosto en el Archivo de Indianos-Museo de la Emigración, ubicado en la Quinta Guadalupe de Colombres. Todas esas personas mantienen vínculos emocionales a ambos lados del Atlántico y consideran a esa sede museística el punto de encuentro entre las dos Asturias, la del interior y la del exterior. Empezando por el final, el Encuentro se cerró con un brindis del empresario asturmexicano Antonio Suárez, impulsor y presidente de la Asociación de Amigos del Archivo de Indianos, quien instó a los presentes a no olvidar sus raíces y a seguir recordando a aquellos asturianos que, «con doce o catorce años, marcharon a América» en busca de una vida mejor. Reclamó un recuerdo –y el brindis– para los emigrantes, tanto para los que triunfaron como para los que no alcanzaron el sueño. Y abogó por a mantener vivo «el recuerdo de la Asturias emigrante».
El presidente del Principado, Adrián Barbón, señaló durante su intervención que hay «una Asturias que se vive emocionalmente más allá de las fronteras», y demandó «mantener ese vínculo emocional, porque es nuestra historia viva como territorio, como comunidad y como tierra», señaló el mandatario asturiano. Barbón puso como ejemplo de ese vínculo emocional entre las dos orillas del Atlántico a Antonio Suárez, quien, tras triunfar en los negocios en América, impulsa ahora nuevas actividades económicas en Asturias.
El jefe del Ejecutivo asturiano destacó que la reunión veraniega del centro museístico de Colombres se está convirtiendo «en un auténtico encuentro hispanoamericano –»cada vez más hispano y cada vez más americano», dijo–, porque cada año más asturianos de origen o descendientes de asturianos de países americanos se integran se incorporan a la Fundación Archivo de Indianos y a la asociación de amigos». En este punto, destacó el «esfuerzo» del director gerente del centro, Santiago González Romero, y su equipo; una labor que también alabó –y calificó de «encomiable»– el presidente de la Fundación, el empresario Francisco González.
Según Barbón, esa incorporación de nuevos miembros a ambas entidades es un asunto «prioritario», porque, además de ayudar a la continuidad del Archivo, «los vínculos a ambos lados del océano son sentimentales, nos unen en el tiempo y son la historia viva de generaciones enteras».
Barbón explicó «lo que significa la emigración para el Gobierno de Asturias»: «Un pilar fundamental». Destacó que hay unas 142.000 personas con nacionalidad española vinculados a Asturias que viven fuera de España, y que solo el veinte por ciento han nacido en Asturias, pues los demás son descendientes de asturianos y asturianas y, gracias a la llamada «Ley de nietos», han podido acceder a nacionalidad española, «cosa de la que nos honramos y agradecemos».
También se refirió a los vínculos económicos entre América y Asturias y calificó de «importantísimo» facilitar el retorno de quienes quieran venir a emprender y a trabajar, como lo es también «facilitar la inversión de aquellos que sienten y tienen en su corazón el nombre de Asturias y quieren invertir en esta tierra. Por eso el Gobierno de Asturias ha lanzado la Ley de proyectos estratégicos, que espero que se apruebe pronto en la Junta General, y que busca facilitar la inversión en Asturias». Finalizó resaltando que el Archivo de Indianos es «la enseña viva, la bandera de esa emigración que forma parte inequívocamente de nuestra historia y que no creeremos olvidar nunca».
Francisco González tuvo un recuerdo para aquellos que «hicieron posible el enorme suceso de la Hispanidad» y aplaudió la decisión del gobierno brasileño de defender al español como segunda lengua del país, algo que, como subrayó, «no ha gustado a países como Alemania, Francia e Italia». Animó a fomentar el portugués en las escuelas españolas y a propiciar una «acción común» entre los dos países ibéricos, esperanzadora en lo político y en lo social».
González calificó al Archivo de Indianos como «la sacristía de la Hispanidad» y reveló que el 22 de mayo de 2025 se celebrará un acto lleno de simbolismo: el izado de la bandera de Guatemala en la Quinta Guadalupe, que se unirá a las que ya ondean de los países incorporados al Museo. El izado de la enseña guatemalteca estará protagonizado por el magnate de aquel país, con raíces familiares asturianas Dionisio Gutiérrez, quien se ha incorporado recientemente a la Asociación de Amigos del Archivo de Indianos.
El presidente de la Fundación que rige el centro museístico recordó que se han cumplido diez años desde que Antonio Suárez impulsó la asociación de amigos del Archivo, «un lugar de encuentro» y, a la vez, de «depósito de documentos» relacionados con la emigración española a América.
Marcos Lamas Seoane, director territorial en Castilla y León, Asturias y Cantabria de Abanca, entidad patrocinadora del evento, destacó los más de 56.000 millones de euros que ha prestado a familias y empresas desde su creación y los 120 millones de la Obra Social que se han invertido en los últimos años. Aseguró que la entidad pretende ser «un puente que una a personas y a países de las dos orillas del Atlántico.
«Estamos convencidos de que el sentimiento de comunidad que compartimos los países Hispanoamérica es una gran fortaleza en todos los sentidos, en el social, en el cultural y, por supuesto, en el económico», subrayó Lamas, quien abogó por conservar y difundir «el legado de tantas y tantas personas que desde Asturias y otros lugares de España emprendieron viaje a América para construir su vida. En su ejemplo tenemos una gran enseñanza: el trabajo y el emprendimiento son la clave del desarrollo de los países», concluyó.
Entre los asistentes, además de los ya citados, estuvieron Jesús Chamorro, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA); Paz Fernández Felgueroso, vicepresidenta de FAI; Ignacio Villaverde, rector de la Universidad de Oviedo; Jorge Martínez, alcalde de Ribadedeva; Luis Fernández Cid de las Alas Pumariño, cónsul general de España en Roma; Isaac Pola, viceconsejero de Industria; Juan Luis Rodríguez-Vigil, expresidente del Principado; Jesús Arango, economista y exconsejero; el también exconsejero Manuel Fernández de la Cera; Teresa Sanjurjo, directora de la Fundación Princesa de Asturias; Juan José Tuñón, director del Archivo Diocesano de Oviedo; Juan Carlos Rodríguez-Ovejero, presidente de la Fundación Ópera de Oviedo; Marcos Niño, director general de Reto Demográfico; Alberto González, director general de la FADE; Miguel Ángel Revilla, expresidente de Cantabria; y Monchita Pando; vicepresidenta de la Asociación de Amigos del Archivo, entre otros.
También estuvieron representados el Sporting (David Guerra, presidente ejecutivo, y Joaquín Alonso, responsable de relaciones institucionales) y el Real Oviedo (Alberto Copete, gestión de patrocinios y Javier Díaz, protocolo y organización). La presencia empresarial fue extensa, de México, de la República Dominicana y de España.
Jazz y comida mexicana del chef de Pueblo Astur, Ramón Celorio
El encuentro veraniego del Archivo de Indianos incluyó, como es habitual, música en directo de jazz y swing, a cargo del grupo «High Society Jazz Band», y una comida mexicana, servida por el cátering Nature de Pueblo Astur, elaborada por el chef Ramón Celorio. Los aperitivos fueron panucho con atún fresco, panceta de Joselito y huevas de arenque; chimichanga de pollo gratinada y sopita de tomate azul con polvo de jamón. El menú incluyó como aperitivo en mesa, brandada de bacalao con pan de karasatu; y después, fabes de la granja con camarón, berberechos y algas, y costilla de res asada con puré de patatas y verduras. De postre, tarta Asturias con helado de avellana.