La Policía Nacional ha culminado una operación que ha durado más de un año, resultando en la detención de 14 individuos y la investigación de otros seis, por su presunta implicación en delitos de extorsión, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal. Las acciones delictivas, que se extendieron por toda España, han causado perjuicios económicos que ascienden a más de 150.000 euros, afectando a más de 100 víctimas.
La operación se inició en febrero de 2023, cuando el Grupo IV de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Navarra recibió varias denuncias de residentes en Pamplona. Estas personas afirmaban haber sido amenazadas a través de una aplicación de mensajería, después de haber utilizado una página de contactos. Los extorsionadores, aprovechándose de esta situación, comenzaron un proceso de intimidación que, en ocasiones, también involucraba a familiares directos de las víctimas, exigiendo sumas de dinero que en algunos casos superaron los 20.000 euros.
La operación policial se extiende por varias comunidades autónomas
En el transcurso de la investigación, que duró once meses, se logró identificar tanto a los encargados de la logística como a las ‘mulas’ o intermediarios, y a algunos de los receptores finales del dinero obtenido de las extorsiones. En Navarra, las siete denuncias investigadas superan los 70.000 euros en perjuicios económicos.
La primera fase de la investigación se centró en la logística del grupo criminal, que incluía la adquisición de terminales móviles y tarjetas SIM utilizadas posteriormente para cometer los delitos. A finales de marzo, agentes del Grupo IV de Policía Judicial de Pamplona se desplazaron a Xirivella (Valencia), donde, en colaboración con la Policía Local de Xirivella y la Policía Municipal de Moncada (Valencia), procedieron a la detención de cinco personas e investigaron a otras cuatro.
En los registros efectuados, se incautaron diversos tipos de documentación de identidad utilizados para adquirir 51 tarjetas SIM, que fueron empleadas en hechos delictivos a nivel nacional. Una evaluación inicial estima que la cantidad de dinero pagada por las víctimas supera los 150.000 euros.
Posteriormente, en una segunda fase realizada entre finales de abril y principios de mayo, los agentes se trasladaron a Vitoria, donde detuvieron a un hombre e incautaron terminales de telefonía móvil. A su vez, por solicitud de la Brigada de Pamplona, la Policía Judicial de la Comisaría de Elche (Alicante) detuvo a cuatro personas más, una mujer y tres hombres.
Finalmente, en la tercera fase de la operación, realizada en mayo, se coordinó una acción entre agentes de Pamplona desplazados a Torrelavega (Cantabria) y agentes de la Comisaría Local de Ibiza, resultando en la detención de cuatro individuos, tres en Cantabria y uno en Ibiza, dos mujeres y dos hombres. La edad de los detenidos e investigados oscila entre los 18 y los 25 años.
Los investigadores continúan analizando la documentación e información recabada, lo que probablemente llevará al descubrimiento de nuevas víctimas y, consecuentemente, a que la cantidad de dinero involucrada en estos delitos sea aún mayor. No se descartan futuras detenciones derivadas de este análisis, según fuentes policiales.