Al menos diez personas, la mayoría niños y adolescentes, han muerto este sábado tras la caída de un proyectil disparado desde el Líbano contra la ciudad de Majdal Shams, en los altos del Golan, en el norte de Israel, según confirmaron fuentes médicas a medios israelíes.
Además, otras treinta personas, algunas de ellas en estado crítico, han resultado heridas tal y como confirmaron estas mismas fuentes, después de un ataque masivo con cohetes desde el Líbano del grupo Hizbulá.
Diversos equipos del servicio de emergencia israelí Magen David Amon (MDA), ambulancias y helicópteros de evacuación médica se trasladaron rápidamente al lugar de los hechos para atender a las víctimas.
«Fuimos testigos de una gran destrucción cuando llegamos al campo de fútbol, así como de objetos que estaban en llamas. Había víctimas en el césped y la escena era espantosa, inmediatamente comenzamos a tratar a los heridos y algunos fueron evacuados a clínicas locales», relata uno de los médicos del MDA.
Las alarmas antiaéreas, según añade este médico, siguieron sonando mientras los equipos de emergencia israelíes prestaban atención médica a los heridos.
Además, un equipo de expertos en desactivación de bombas de la Policía israelí del distrito norte siguen inspeccionado y asegurando la zona de los altos del Golan donde han caído «múltiples municiones para eliminar cualquier riesgo adicional», según detallan en un comunicado.
Según recoge el periódico israelí The Times of Israel, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, está manteniendo una reunión de seguridad en Estados Unidos tras este ataque.
Asimismo, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, está llevando a cabo una evaluación con el Jefe del Estado Mayor del Ejército, el Teniente General Herzi Halevi, y otros altos funcionarios de defensa, según anunciaron en sus redes sociales.
«No hay duda de que Hizbulá cruzó todas las líneas rojas», advirtió el ministro de Exteriores israelí, Israel Katz en una entrevista con la televisión israelí Canal 12.
«Nos enfrentamos a una guerra total», agregó el ministro israelí.
En sus canales, el grupo libanés Hizbulá ha reivindicado el lanzamiento de decenas proyectiles contra una base militar en los Altos del Golan.
Hizbulá niega la autoría del ataque
El grupo chií libanés Hizbulá negó este sábado haber atacado la ciudad de Majdal Shams, en los Altos del Golán ocupados por Israel, después de que un proyectil cayera en esta población y matara al menos a nueve personas, la mayoría niños y adolescentes.
«La Resistencia Islámica en el Líbano desmiente categóricamente las acusaciones vertidas por algunos medios de comunicación enemigos y diversas plataformas mediáticas sobre la acción que tuvo como objetivo Majdal Shams», dijo la formación armada en un escueto comunicado a través de sus canales oficiales.
Subrayó que «la Resistencia Islámica no tiene nada que ver en absoluto con el incidente y niega categóricamente todas las falsas acusaciones al respecto».
Sin embargo, el Ejército israelí afirmó que la acción fue lanzada por Hizbulá.