El polideportivo de Nou Moles entrará en funcionamiento antes de acabar el año. La concejala de Deportes, Rocío Gil, ha anunciado que la Junta de Gobierno Local aprobará este viernes la recepción de esta instalación, con la vista puesta en su próxima apertura, una vez se resuelvan los condicionantes que debe subsanar la empresa, y el recurso administrativo sobre las autorizaciones demaniales interpuesto por la oposición municipal.
Visita de la alcaldesa de Valencia al polideportivo de Nou Moles. / AYTO. DE VALENCIA
Tal como ha explicado Rocío Gil, “tras más de 13 años desde que se inició su construcción, el polideportivo de Nou Moles será una realidad para sus vecinos este año”. “De esta manera –ha subrayado la concejala- se pone fin a una etapa de bloqueo y se da respuesta a una reivindicación histórica del barrio”. La Junta de Gobierno Local aprobará también la adscripción del polideportivo al Organismo Autónomo Fundación Deportiva Municipal para que ponga a punto el nuevo equipamiento municipal de cara a su apertura al público.
El polideportivo de Nou Moles cuenta con diferentes alturas, un pabellón con aforo para 1.600 personas, una piscina de 30 metros, un vaso de chapoteo, vestuarios, sala de musculación, dos salas de fitness, una zona de vending, oficinas y aseos. La concejala ha recordado que desde el Ayuntamiento, se han invertido ya 850.000 euros en la nueva instalación; y en las próximas semanas se invertirán 250.000 euros más. En este contexto, Gil ha lamentado “que el grupo municipal Socialista haya presentado un recurso que –en palabras de la concejala- está generando retrasos y bloqueo en la puesta en marcha de esta instalación”. “Desde el actual equipo del Ayuntamiento de València vamos a seguir trabajando contrarreloj para que esta decisión no afecte a su puesta en marcha y los vecinos cuenten con una instalación deportiva de calidad”, ha asegurado la delegada.
Plan de choque
Durante su intervención, la concejala de Deportes se ha referido también al plan de choque puesto en marcha hace ahora un año para resolver la situación de las instalaciones deportivas municipales, “un plan –ha afirmado Rocío Gil- para resolver el caos administrativo y de mantenimiento en el que se encontraban estas instalaciones”. Gil ha recordado que cuando se hizo cargo de la Concejalía de Deportes, hace ahora un año, “la totalidad de los convenios singulares de gestión indirecta que debían renovarse entre 2015 y 2023 se encontraban caducados, con la consiguiente inseguridad jurídica y la situación de precariedad que ello provoca”.
La concejala ha detallado las acciones emprendidas en cada caso para resolver la situación. En primer lugar, ha anunciado que la remodelación prevista para el Polideportivo de Marxalenes, que será realizada por fases para evitar su cierre. Además, ha anunciado que se han iniciado los trámites para licitar una nueva concesión para regular un equipamiento que lleva desde abril de 2018 con la concesión caducada.
En cuanto al Polideportivo de Abastos, el proyecto se encuentra ahora mismo en periodo de exposición pública, que concluye el próximo 2 de agosto, y una vez la Junta Consultiva de la Generalitat emita informe favorable, el expediente será enviado al servicio municipal de Contratación para licitar la concesión administrativa que prevé una inversión por parte de operador de, al menos, 8 millones de euros. “Esta instalación –ha recordado Gil- lleva con la concesión caducada desde mayo de 2018”.
También se ha anunciado el cierre del Complejo Orriols este próximo 31 de agosto, ante las deficiencias detectadas en la cubierta y la necesidad de reformar y adaptar por completo la instalación a la nueva realidad del deporte de la ciudad tras 24 años de servicio al barrio. “Esta instalación tenía la concesión administrativa caducada desde el 2015 y a los trabajadores y usuarios se les ha ofrecido diferentes soluciones para que se vean afectados en la menor medida posible”, ha explicado la concejala.
Otra instalación deportiva municipal que se va a ver completamente renovada será La Hípica, cuya construcción data de 1998 y “que requiere de una profunda actualización, fruto también de la aplicación de la legislación referente a los núcleos zoológicos en zonas urbanas, que obliga a cambiar por completo el planteamiento de la oferta deportiva”, ha explicado Rocío Gil. El próximo 15 de septiembre, cuando termine el periodo de apertura de la piscina de verano, se efectuará el cierre. La opción de gestión elegida para esta instalación es la concesión demanial, que incluirá la remodelación integral. “Ya hay una propuesta presentada ante el Ayuntamiento por parte de la iniciativa privada, y vamos a iniciar el procedimiento de concurrencia de manera pública y transparente”, ha subrayado la concejala.
La piscina de Ayora también forma parte del plan de choque con una actuación presupuestada en 750.000 euros. Se prevé la rehabilitación total de la instalación, que fue construida en 2003, lo que incluye la renovación de la deshumedectadora y del sistema de ventilación. Aunque se trate de una actuación integral, el proyecto se ha diseñado por fases, de manera que la instalación no tenga que ser cerrada, afectando lo menos posible la actividad. “La piscina de Ayora llevaba con la concesión caducada desde el pasado mes de abril de 2019, y la licitación de las obras se encuentra actualmente en el servicio municipal de Contratación. Una vez adjudicada, el plazo de ejecución previsto es de tres meses”, ha explicado la delegada de Deportes.
Finalmente, en cuanto termine la temporada de verano, se procederá al cierre de las piscinas de Parque del Oeste, Benicalap, Castellar-Oliveral y El Palmar para llevar a cabo una profunda reforma de todas ellas, que supondrá una inversión total de cerca de 3.300.000 euros. En paralelo, el personal técnico está trabajando en los pliegos que regirán la nueva concesión, para que pueda estar adjudicada antes de empezar del verano de 2025, “de manera que los ciudadanos no pierdan ni un solo día de disfrute de estas piscinas”. “La concesión de las tres primeras piscinas vencía este año y se negoció con el actual gestor una prórroga de un año para encajar este plan que permitiese continuar con el servicio y preparar los pliegos de las obras y la nueva concesión”, ha añadido Gil.
La concejala de Deportes Rocío Gil, junto a María Ángeles Vidal, directora gerente de la Fundación Deportiva Municipal de Valencia. / FDM VALENCIA
Autorizaciones demaniales
En cuanto al segundo modelo de gestión indirecta, lo que hasta ahora eran convenios con entidades deportivas, Rocío Gil ha recordado que, a su llegada al gobierno municipal, se encontró “con 34 instalaciones con el convenio vencido, lo que generaba, de nuevo, una situación de inseguridad a clubes y federaciones que, además, no tienen músculo económico y son entidades sin ánimo de lucro y atienden más de un millón de usos deportivos al año en nuestra ciudad”.
Durante estos últimos meses se ha estado trabajando en “unas bases de autorizaciones demaniales con el tejido asociativo, que han contado con una gran participación, y que permiten resolver uno de los grandes problemas del deporte de València”, ha asegurado Gil. Estas bases serán publicadas en las próximas semanas, con el objetivo de “tener regularizada la gestión de estas instalaciones de la ciudad, tal como me comprometí en la reunión del primer consejo rector de la FDM”, ha recordado la concejala.
En este caso, Rocío Gil ha lamentado que “el recurso interpuesto por el grupo municipal Socialista ha ralentizado los plazos previstos para dar salida a esta solución de gestión de las instalaciones”, y ha anunciado que “el próximo lunes, en el Consejo Rector de la FDM, se dará cuenta de la resolución del recurso”. “Esperamos que con esta resolución, aprobemos por fin las bases de las autorizaciones demaniales, dando respuesta a las demandas del tejido asociativo, y no se continúe bloqueando esta solución vital para el deporte de nuestra ciudad”, ha afirmado la concejala.
Aumento de la inversión en mantenimiento
En lo que se refiere a las instalaciones deportivas de gestión directa municipal, la regidora ha subrayado que en este primer año de mandato, “hemos aumentado un 84% el presupuesto destinado a inversiones para adecuar y reformar las instalaciones deportivas más demandas, lo que nos ha permitido reparar ocho equipamientos deportivos con una inversión superior a 1.600.000 euros”. En concreto, Rocío Gil se ha referido a las reparaciones realizadas en el pabellón de la Malvarrosa, con una inversión de 265.000 euros; el pabellón del Cabanyal-Canyamelar, con una inversión de 130.000 euros; o las actuaciones que se están realizando en la piscina de Trafalgar, con una aportación de 200.000 euros, a las que hay que sumar las realizadas en los polideportivos de Benimámet, Benimaclet, o Nazaret.
