En febrero de 2022, el Comité Olímpico Internacional condenó la invasión de Rusia de parte de los territorios ucranianos. Condenó enérgicamente la violación de la tregua olímpica e instó a las federaciones a excluir a los atletas rusos y bielorrusos -por el apoyo de este país a la operación militar-. Desde entonces, el organismo que preside Thomas Bach ha mantenido el veto a Rusia y Bielorrusia como comités, pero ha levantado el veto a los atletas individuales. Hasta 15 deportistas rusos y 17 atletas bielorrusos estarán en París. Eso sí, lo harán bajo bandera neutral, no participarán en la ceremonia de inauguración y todas sus manifestaciones públicas serán controladas.
Rusos sin pertenencia al ejército nacional
Para estar en los JJOO, los atletas han tenido que pasar un filtro de neutralidad. El corte principal ha sido su pertenencia con el ejército y las fuerzas armadas rusas, así como si se han pronunciado sobre el conflicto entre Rusia y Ucrania. El primer requisito era estricto, porque la mayoría de los atletas han prestado servicio militar y hay equipos como el CSKA o el Dínamo de Moscú, cuya historia está directamente vinculada con estas instituciones.
Sin embargo, el Comité Olímpico Internacional (COI) no ha exigido, como pidió el Comité Olímpico Nacional de Ucrania, una denuncia escrita de lo que los medios de comunicación de Rusia llaman denominan «operación militar especial en Ucrania».
Algo que han denunciado organizaciones como Global Rights Compliance, un bufete especializado que cuestiona la participación de los atletas de Rusia, que, bajo la denominación de Comité Olímpico Ruso, por sanciones de dopaje, fueron quintos en el medallero de Tokio 2020. Si los que han logrado la absolución logran preseas en París 2024 no figurarán en esta clasificación.
Presencia en París 2024: Medvedev sí, Sabalenka no
Algunos de los competidores que pasaron el ‘examen de neutralidad’ para París 2024 renunciaron, como Shamil Mamedov, ganador de un bronce en el Mundial de Lucha más reciente. Aunque alegó haber sufrido una lesión, su federación ejecutó un veto a todos sus participantes, como ocurrió con la de judo. Ambas renunciaron a competir en los JJOO pese a recibir el visto bueno del COI, porque este prohibió la participación de algunos de sus mejores deportistas, de ahí que optaron por una renuncia en bloque, según informó la agencia estatal TASS.
El tenis será el deporte que contará con más representantes rusos en París, con Daniil Medvedev (número 5 del mundo), Pavel Kotov, Roman Safiullin, Yekaterina Alexandrova, Mirra Andreeva, Diana Shnider y Yelena Vesnina. No estará en París la bielorrusa Aryna Sabalenka, numero tres del mundo, para «centrase en su salud y prepararse para los torneos de pista dura», según expresó en su renuncia. Victoria Azarenka, número 20 del mundo, aceptó inicialmente la petición, pero terminó por rechazarla. En los JJOO habrá también tres piragüistas: Zakhar Petrov, Alexey Korovashkov y Olesya Romasenko (esprint); el nadador Evgenii Somov; los ciclistas Tamara Dronova, Alyona Ivanchenko y Gleb Syritsa; y la gimnasta Anzhela Bladtseva.
Por su parte, los deportistas bielorrusos que estarán en París 2024 son los gimnastas Ivan Litvinovich y Viyaleta Bardzilouskaya; la ciclista Hanna Tserakh, el taekwondista Georgiy Gurtsev; los halteras Siuzanna Valodzka y Yauheni Tsikhantsou; los luchadores Abubakar Khaslakhanau y Mahamedkhabib Kadzimahamedau; los escaladores Yauheni Zalaty y Tatsiana Klimovich; las tiradoras Darya Chuprys y Alia Piatrova; los piragüistas Uladzislau Kravets y Yuliya Trushkina; y los nadadores Alina Zmushka, Ilya Shymanovich y Anastasiya Shkurdai.
La rebelión ucraniana y los Juegos de los BRICS
El COI creó lo que denomina como Individual Neutral Athletes (AIN), la denominación utilizada para los atletas rusos y bielorrusos que pueden participar en los JJOO de París 2024. Para este equipo se determinaron una serie de cuotas basadas en las clasificaciones existentes por disciplinas y teniendo en cuenta la elegibilidad de las diferentes federaciones.
«La participación en los Juegos Olímpicos está sujeta a la aceptación por parte del atleta de la invitación individual y a la firma de las condiciones de participación aplicables a los participantes. Es decir, los participantes tienen el compromiso de respetar la Carta Olímpica, incluida la misión de paz del Movimiento Olímpico», declara el COI.
Ivan Kuliak, el gimnasta ruso que hizo apología de la invasión de Ucrania. / EPE
El movimiento que disipó las dudas del COI para suspender al Comité Olímpico Ruso (COR) fue que esta organización incluyó a los consejos olímpicos de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, es decir, territorios ocupados de Ucrania. De ahí que la mera presencia de los atletas rusos, aunque sea con bandera neutral, es una ofensa para el Comité de Ucrania, que llegó a amenazar con no participar en los JJOO de París, como sucedió con Moscú 1980 y Los Ángeles 1984, en relación al equipo soviético.
Ante esta situación de bloqueo, a Rusia solo le quedó participar como nación en los Juegos de los BRICS (acrónimo de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, denominación nacida en 2010 como espacio internacional alternativo al G7). En este evento, celebrado en Kazán, participaron, según la organización, «3.000 deportistas de 100 países». Sin embargo, los podios mostraron algunas categorías en las que solo participa un atleta. Precisamente, una de las imágenes que quiere evitar el COI en París en 2024 es la que protagonizó el gimnasta ruso Ivan Kuliak en la Copa del Mundo disputada en Doha en mayo de 2022.
Críticas a la presencia de Israel en los JJOO
El deportista fue sancionado con un año sin competir por aparecer en al ceremonia con una camiseta con la letra ‘Z’, símbolo de la intervención militar de Rusia en Ucrania. Más difícil será que no se produzcan gestos como el que tuvo la sablista ucraniana Olga Kharlan, que le negó el saludo a la rusa Anna Smirnova tras vencerle en los Mundiales de Milán. El COI tendrá que estar ojo avizor, como con los atletas de Israel, cuya presencia en los JJOO también ha sido puesta en cuestión, sobre todo por las delegaciones árabes.
La delegación olímpica de Israel partió rumbo a París con un equipo de 88 atletas que participarán en una competición marcada por las crecientes preocupaciones de seguridad y las tensiones geopolíticas por la guerra en Gaza. Con todo, el ministro de Asuntos Exteriores francés declaró que «la delegación israelí es bienvenida en Francia», y añadió que los atletas israelíes recibirán protección permanente durante su estancia en París.
Según el Comité Olímpico Palestino, que estará representado con ocho participantes, más de 340 atletas, árbitros y personal deportivo han sido asesinados por Israel en diez meses de bombardeos y otros ataques indiscriminados o como consecuencia de la falta de atención médica por un sistema sanitario colapsado y sin recursos por culpa del bloqueo israelí. Rusos, bielorrusos, israelíes, palestinos… Solo algunos de los focos a los que tendrá que prestar atención la organización de una cita que será un reto en seguridad.
