Applus ha presentado este miércoles sus resultados correspondientes al primer semestre del año, un periodo en el que ha obtenido ingresos por valor de 1.094 millones de euros, lo que representa un incremento del 9,3% en relación a las cifras del mismo periodo del año anterior.
Además, el resultado operativo ha sido de 125 millones de euros, tras anotarse una subida interanual del 13,2%, con un margen del 11,4%, cuatro décimas por encima del 11% registrado un año atrás.
La compañía también ha reportado un flujo libre de caja de 65 millones de euros, lo que supone un crecimiento de 10% desde el primer semestre del año pasado, y un ratio de deuda neta/EBITDA de 2,4 veces.
De cara al futuro, ha mantenido sus previsiones para el conjunto del año, por lo que todavía espera un «crecimiento orgánico de los ingresos de entre medio y dígito alto único«, además de un «aumento del margen del resultado operativo hasta aproximadamente el 11,5%». En los próximos trimestres, Applus conservará su «continuo enfoque en la mejora de la calidad del porfolio».
«Seguimos con buenos resultados en nuestros negocios, los ingresos continúan creciendo de forma orgánica en todas las divisiones, soportado por los incrementos de precios a dígito único bajo», destaca Joan Amigó, CEO de Applus.
Amigó ha anunciado que la compañía ha recibido notificación de que le ha sido adjudicado el nuevo contrato de la división de IDIADA para los próximos 25 años.
«Estamos convencidos que este contrato nos permitirá incrementar el valor para nuestros accionistas. Del mismo modo, seguimos avanzando en la construcción de las nuevas estaciones para los contratos de inspección técnica de vehículos en Arabia Saudí, India y China», detalla.
Asimismo, ha señalado que «el proceso para la exclusión de cotización de las acciones de Applus Services se ha iniciado», y desde la firma esperan «ser una compañía de capital privado antes de la finalización del ejercicio«.
