Los noveldenses llevaban un año entero soñando con sus días grandes y, tras 365 días de espera, ya se encuentran sumidos en plenas Fiestas de Moros y Cristianos. Los festeros han escrito en la historia una nueva Entrada Cristina que ha inundado a ritmo de marchas y pasodobles cada rincón de Novelda este domingo.
Las altas temperaturas, protagonistas estos días, no han impedido que cientos de personas llenaran el recorrido, eso sí equipadas con abanicos y ventiladores pequeños para hacer frente al calor. Unos tres mil festeros, Moros y Cristianos, han sido los encargados de derrochar el júbilo y la ilusión sembrada durante un año de sueños y preparativos.
Inauguraron el gran desfile la abanderada y la reina cristiana y tras ellas las comparsas de Mozárabes, Zíngaros y Astures. Las representantes festeras han sido envueltas en aplausos y piropos por parte de los allí presentes.
Las comparsas de la cruz han cedido la pasión al bando moro. Con el embajador y la sultana de la media luna al frente y, tras ellos, las comparsas de Árabes Damasquinos, Piratas Berberiscos, Árabes Beduinos, Negres Betànics y Árabes Omeyas, llenaron de magia la tarde noche en Novelda.
Carrozas, caballos, boatos… Todo ello para demostrar el esplendor de unas fiestas que nada más acaban de empezar. El lunes estará marcado por las misas en honor a la patrona Santa María Magdalena, bajada el pasado domingo del santuario. La jornada culminará con una procesión por las calles del municipio, momento de profunda devoción.
