La manifestación del Orgullo LGTBI que recorrió en la tarde de este sábado el centro de Alicante fue una plasmación bastante fidedigna de lo que es la diversidad. Entre las miles de personas que la secundaron (la organización hablaba de 15.000, y los más optimistas señalaban que en torno a 20.000) no solo había representantes de todas las letras del colectivo, sino también de todas las tendencias, los físicos, las estéticas y hasta de distinta línea política. Pero todos los asistentes tenían algo en común: la reivindicación de uno mismo y del conjunto del colectivo, y la defensa de la conquista de derechos frente a cualquier amenaza.
Fiesta y diversión, pero ante todo lucha. Ese fue el sentir que se pudo percibir en todo momento en una manifestación que, además de por mutitudinaria, destacó por lenta y por tener un final un tanto confuso, en el que no se llegó a leer el manifiesto que las tres entidades organizadoras habían preparado. Y en estas circunstancias flotaba en el aire la controversia con el Ayuntamiento, que en los últimos días había desembocado en una ruptura total a raíz de la fiesta posterior a la manifestación en la Concha de la Explanada, impulsada por el Consistorio y con la que las entidades no estaban de acuerdo por sus limitaciones.
El malestar se incrementó en el transcurso de la movilización de este sábado. La hora prevista de inicio eran las 19.00 horas, pero hasta 45 minutos después no empezaron a avanzar los primeros manifestantes, que poco después se pararían durante otra media hora al inicio de Alfonso el Sabio. La razón era que el tráfico no se había cortado previamente en la avenida, y luego solo se cerró una calzada, hasta que al fin, en torno a las 20.15, la vía quedó totalmente cortada. Pero la escena se repetiría después un par de veces, con la pancarta de cabecera al ir a enfilar la Rambla y luego unos pocos metros más adelante.
Crítica al Ayuntamiento
En el transcurso del primer parón, el presidente de Diversitat, Juan David Santiago, agradeció, en nombre también de Alicante Entiende y Entendemos, «la respuesta social, ciudadana y colectiva que está teniendo el Orgullo», aunque lamentó «de nuevo, la poca colaboración del Ayuntamiento». El responsable criticó abiertamente que Alfonso el Sabio no hubiera sido todavía completamente cortada «cuando estamos a punto de entrar» en ella; «con casi 15.000 personas a nuestras espaldas, sigue con tráfico y atascada».
Y cuando al fin la marcha llegó al final del recorrido, llegó la duda sobre si había algo después y qué. Muchas personas preguntaban a la organización si había actuaciones, o al menos un escenario o una fiesta, y la mayoría reaccionaban con indignación al saber que la única opción era acudir a la Concha de la Explanada. Una fiesta a la que, por otra parte, una gran mayoría dio la espalda; hacia las 21.50, mientras cientos de personas lo daban todo en la calle San Fernando, a donde varias carrozas habían ido a dejar que bajara la gente, en el auditorio estaba el disc-jockey prácticamente solo. Un poco más tarde, hacia las 22.15, algunos manifestantes empezaban a acudir al lugar, pero el ambiente era todavía bastante desangelado.
Tal y como se había anunciado, varias carrozas se quedaron en la Rambla, y la idea inicial era leer el manifiesto desde una de ellas. Sin embargo, ante la imposibilidad de hacerlo en condiciones, y quizá también en vista de que la gente empezaba a dispersarse, se optó por no hacerlo. Según avanzó la organización, este domingo se colgará en redes sociales. El documento incluye cinco reivindicaciones principales: actualizar el Plan LGTBI para Alicante, una participación activa y decisiva de las asociaciones LGTBI+, protección a los colectivos vulnerables, educación inclusiva y respetuosa y un Orgullo «para todos, todas y todes», verdaderamente inclusivo.
Promoción en Manchester
La manifestación contó, por otro lado, con representación institucional de la Generalitat, que estuvo presente en una de las carrozas. Entre los asistantes, la consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Nuria Montes, quien recordó que «el turismo LGTBI es un producto absolutamente fundamental» que «llevamos muchos años promocionando». La responsable avanzó, además, que el próximo agosto la Comunidad Valenciana estará presente en el Pride de Manchester, donde «tendremos nuestro espacio para poder promocionar este turismo en el mercado británico«. También acudió el director general de Diversidad, Stephane Soriano, quien incidió en la «apuesta por la diversidad, la igualdad y el Orgull de Comunitat» y recordó que «reivindicar los derechos de las personas LGTBIQ+ es fundamental».
Asimismo, se pudo ver a representantes del PSOE, Compromís y EU, así como de UGT y COOO, entre otros. Por citar algunos nombres, los del subdelegado del Gobierno, Juan Antonio Nieves, y la diputada en el Congreso Àgueda Micó, junto a diferentes diputados en las Cortes como la socialista Yaissel Sánchez y los valencianistas Gerard Fullana y Francesc Roig, y concejales de Alicante como los socialistas Ana Barceló y Raúl Ruiz, los dos representantes de Compromís, Rafa Mas y Sara Llobell, y el edil de EU-Podem Manolo Copé.