Ahora que estamos en verano y que, por lo general, tenemos vacaciones y más tiempo libre, estamos más atentos y centrados en las cosas que nos gustan. Sí, tenemos el tiempo para ver esa serie que cuando trabajamos no podemos ver, para planear los viajes que nunca podemos planear, o para, simplemente, no hacer nada, que muchas veces es muy necesario.

Tenemos mucha más tranquilidad y eso hace que nos fijemos en cosas en las que normalmente no reparamos. En esa ropa que lleva nuestra vecina y que nos encanta, en ese libro que tenemos en la biblioteca y que tiene muy buena pinta y, también, en ruidos que nunca escuchamos. Sí, eso es como cuando te quedas solo en tu casa y empiezas a escuchar ruidos que nunca habías escuchado.

Normalmente, suelen ser los vecinos de pisos contiguos, o de arriba y abajo, y por lo que solemos llamarles la atención si persisten. Claro, que a veces eso genera alguna disputa, y si no, que se lo digan a la cuenta de X (antiguo Twitter) @LiosDeVecinos, que se dedica a recopilar algunas rencillas que ocurren en diferentes comunidades de vecinos alrededor de España.

Ha puesto el foco en una que ha ocurrido en un edificio de Granada, donde unos vecinos se han quejado del ruido que hacen los del piso de arriba. El resto es historia.



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