Caos en los aeropuertos en plena operación salida de las vacaciones para muchos. Una caída de los sistemas informáticos a nivel mundial ha provocado retrasos en los vuelos en todo el mundo y colas en los aeropuertos al no poder utilizar los programas informáticos requeridos para facturar. En el caso español, el impacto más importante ha sido el de Aena, que ha provocado retrasos en muchos de los 5.600 vuelos operados y 400 cancelaciones hasta las 19.00 horas, lo que implica la eliminación de apenas el 6,5% del total de las operaciones, según informa el gestor aeroportuario.
Aena reestableció a media mañana sus principales sistemas después de haber sufrido los efectos de la incidencia informática mundial que le impedía acceder a sus sistemas informáticos y, por tanto, a la gestión de los billetes de los viajeros.
El problema, registrado de madrugada, ha surgido a raíz de una actualización -no un incidente de seguridad ni un ataque- de un programa de ciberseguridad de Crowdstrike, proveedor de Microsoft, que utilizan muchas de las grandes compañías de todo el mundo, y que se refleja en la generación de un pantallazo azul del bloqueo del sistema, según informa el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE).
Esa pantalla es la que se han encontrado este viernes por la mañana muchos trabajadores de Aena. La primera reacción del gestor aeroportuario, además de anunciar el problema a través de sus redes sociales, fue activar los sistemas de contingencia y gestionar algunos procesos de manera manual -por ejemplo, al generar billetes a mano- para poder, así, mantener las operaciones. A media mañana, la compañía afirmó estar cumpliendo con la programación del día y las operaciones tanto de salida como de llegada se estaban produciendo, aunque con demoras, pero sin necesidad de paralizar su actividad en ningún momento.
Aena no ha sido la única compañía afectada en el sector aéreo, también Iberia se ha visto impactada por el fallo de la red de seguridad del gigante informático. La aerolínea española tuvo numerosísimos retrasos, aunque no ha dado una cifra. La aerolínea del grupo IAG decidió provocar «deliberadamente retrasos para esperar a que lleguen los pasajeros al avión» y que los clientes puedan, así, proseguir con su itinerario vacacional. El objetivo de la empresa durante la jornada era evitar a toda costa la cancelación de sus vuelos para poder mantener la «regularidad» de su operativa. Según fuentes de la compañía, ‘solo’ ha tenido que cancelar un vuelo entre Madrid y Zurich por el cierre de este último aeropuerto.
De hecho, las rutas más perjudicadas a nivel europeo -sobre todo por la mañana- han sido las que conectan con los aeropuertos de Berlín y Amsterdam, así como Zurich, que han paralizado durante varias horas los aeropuertos, según recoge Eurocontrol. No obstante, a media mañana los tres aeródromos habían recuperado su operativa, aunque con una actividad mucho más lenta de lo habitual y con importantes retrasos.
También los aeropuertos de Heathrow, Edimburgo, Brisbane (Australia) y Nueva Zelanda han registrado problemas, entre muchos otros a lo largo y ancho del planeta. A las 19.30 horas se habían producido en todo el mundo más de 30.000 retrasos y 3.700 cancelaciones, según la aplicación Flight Aware, pero no todas estas cifras se pueden atribuir al fallo informático. Como ejemplo para comparar, un día antes había habido casi 36.000 retrasos y casi 1.500 cancelaciones durante toda la jornada.
Aerolíneas como Iberia, Air Europa o Ryanair han pedido a todos sus clientes acudir a los aeropuertos con mayor antelación de lo habitual y consultar el estado de sus vuelos. La organización de consumidores Facua recuerda a los usuarios que en caso de cancelación de vuelos, los clientes tienen derecho a comida y alojamiento en hotel si lo necesitan. En caso de retraso en el vuelo, la asociación añade que si este es de cinco horas o superior, el consumidor tiene derecho a la devolución del importe del vuelo o a un vuelo alternativo en las fechas que acuerde con la aerolínea.