La fauna salvaje que campa a sus anchas por las montañas de la provincia de Alicante está provocando afecciones a los cultivos en varias zonas. Así lo ha indicado la Unió Llauradora i Ramadera quien ha realizado un estudio sobre los efectos que causa anualmente este tipo de animales como los arruís, muflones, ciervos y cabras y que alcanzan pérdidas directas para los agricultores se acercan a los 10 millones de euros.

Fuente