El Consell de Mallorca recibió el apoyo de su socio de gobierno, representado por Vox, en su decisión de acoger a los 40 migrantes menores que llegaron la pasada semana a Baleares a bordo de diferentes pateras. El presidente del IMAS, Guillermo Sánchez, según ha confirmado esta mañana habló de la situación con el vicepresidente del Consell, Pedro Bestard, y éste le dio su aprobación a asumir la tutela de estos chicos, entre otras cosas porque es una obligación legal de la institución.
Sánchez, en rueda de prensa, confirmó que Mallorca se ha convertido en los últimos meses en una ruta migratoria. Mientras que el año pasado llegaron a la isla un total de 180 menores, que han quedado bajo la custodia del Consell, este primer semestre del año la cifra ya ha alcanzado los 146. Sin embargo, las previsiones apuntan a que el número de menores alcanzará la cifra de 250 a final de año.
El presidente del IMAS insistió en que este fenómeno migratorio ha tensionado todos los medios del Consell en cuanto a falta de espacio adecuado y personal para que se haga cargo de estos adolescentes. La situación ha obligado al Consell a ampliar un total de 102 nuevas plazas para poder ubicar a estos migrantes. También se ha solicitado ayuda al Obispado de Mallorca, para que ceda los espacios que en su momento ubicó a las familias de Ucrania que huían de la guerra.
El represente del Consell anunció que ha realizado, a través de una carta enviada al delegado del Gobierno, solicitando la ayuda del Ejecutivo central, tanto económicamente, como en la cesión de plazas para poder acoger a estos menores. Sánchez fue muy crítico con la política migratoria que se está llevando a cabo desde el Gobierno, por quedar con los brazos cruzados ante la llegada masiva de pateras.
En estos momento, el IMAS tiene a su cargo un total de 580 menores. De ello, 283 son migrantes. El coste diario que se dedica a cada uno de estos chicos es de 239 euros. Ante la última avalancha de llegadas, el Consell ha tenido que pedir un aumento presupuestario dedicados únicamente a los menores. Con la ampliación el presupuesto superará los doce millones de euros.
El presidente del IMAS detalló las peticiones que se están planteando al Gobierno para dar respuesta a este fenómeno migratorio. La primera de ellas es solicitar recursos económicos y cesión de espacios, unido a un plan de contingencia financiado con fondos públicos para hacer frente a estos gastos extras. También se reclama un plan racional de política migratoria, unido a una declaración de emergencia. Por último, se pide una reunión de presidentes, convocada por Sánchez, para tratar este complicado tema y buscar una solución.
El representante del Consell pidió la colaboración inmediata del Gobierno, por cuanto se pretende que Baleares no sufra la misma situación que padece Canarias, cuyo número de menores migrantes tutelados supera los seis mil. Recordó Sánchez que la aceptación de estos chicos no debe ser un debate político, sino que se trata de una obligación legal, ya que las instituciones tienen la obligación de asumir la tutela de estos adolescentes que viajan solos en patera.
Sánchez no cree que sea incompatible que mientras en Madrid están en contra de que se acojan a estos chicos, Vox del Consell de Mallorca muestre su apoyo a los responsables del IMAS, sobre todo teniendo en cuenta que están cumpliendo una obligación legal. Por tanto, no cree que el pacto de gobierno en el Consell entre ambos partidos esté en juego, sino todo lo contrario, cada vez goza de mayor estabilidad. El presidente de la institución confirmó que los chicos que acoge la institución son menores de edad, rechazando por tanto las dudas que planteó la portavoz de Vox en el Parlamento, Manuela Cañadas, que puso en duda que se trate de menores de edad. Sánchez dijo que es la Policía la que confirma la edad de los ocupantes de las pateras.
Por otra parte, la portavoz socialista, Catalina Cladera, aseguró esta mañana que no tiene ningún sentido que Vox haya roto los pactos de gobierno de todas las comunidades autónomas por el reparto de los migrantes, mientras que este partido en el Consell de Mallorca muestre su apoyo al acogimiento de estos chicos. Por ello, Cladera pidió al presidente Galmés que rompa de una vez por todas el pacto con la ultraderecha. También acusó al equipo de gobierno de carecer de una planificación para hacer frente a la llegada de estos acogimientos y aseguró que Mallorca dispone de espacios más que suficientes para acogerlos.
En la misma línea de crítica se mostró Jaume Alzamora, conseller de Més, que recordó que la competencia sobre los menores le corresponde al IMAS y pidió que se aplique la ley sobre estos adolescentes.
Nuria Riera, portavoz del PP en el Consell, mostró su apoyo al equipo de Gobierno y consideró que, ante esta avalancha de llegada de pateras, la institución solicite la implicación del Ejecutivo de Pedro Sánchez.